Sr. Director de La Nación, Don Bartolomé Mitre.La casa de Marcó del Pont, en Flores, era de mi bisabuelo y allí se reunian Don Bartolomé Mitre y vários de los señores que hicieron nuestra patria.
Hoy le acabo de mandar esta carta a mi prima Mercedes Marcó del Pont a su mail privado, no se si la leerá y si lo hace, tampoco creo que me responda, pero no puedo quedarme callado ante tanta barbaridad!
Jorge Casabal Marcó del Pont
Buenos día, Mercedes.
Hace un tiempo chocamos con vos, en la calle y conversamos un minuto...
Te escribo, porque desde que comenzaste tu carrera pública, es decir
desde que empezaste a salir en la tele, hablando de cuestiones
económicas, hace varios años ya, siempre estuve muy orgulloso de mi
prima, Mercedes Marcó del Pont.
Hoy, no puedo decir lo mismo.
Estoy muy triste, por nuestra Patria, por nuestra familia, por nuestro
apellido, que está saliendo en todos los diarios, pero que no sale
entre las buenas noticias.
Te acordás que hace poco estuviste en Vigo, España cuando celebraron
los 250 años de la llegada de Don Buenaventura Marcó del Pont...
Fui yo, el que empecé hace un tiempo, a escribir a Vigo, donde creían
que ya no había parientes de Don Buenaventura...
Estuviste y fuiste agasajada, qué bueno!, me imagino que habrás
sentido gran orgullo de tus antepasados...
Pero, querida prima, algo te ha pasado en tu vida, que te has salido
del camino...
Don Buenaventura padre, y su hijo Buenaventura Miguel, eran
comerciantes espléndidos, devotos de la Santísima Virgen María,
excelentes personas, fundadores de una enorme familia, obedientes del
Rey de España, etc.
Pero, si bien ocupaban cargos públicos o cargas públicas, lo hicieron
defendiendo siempre la libertad de comercio... y así se lo reclamaron
a su Rey.
Hoy, querida Mercedes, te has puesto en otro sitio totalmente contrario.
No se trata ya de defender ideas de izquierda o derecha, se trata de
algo que ha dejado de ser ciencia económica, para pasar a ser pura
prepotencia mentirosa y demagógica.
Ni siquiera podés afirmar que se defiende la causa de los pobres, en
cuyo caso, yo también me adhiero...
Estás defendiendo, la causa de un grupo de lunáticos, que usan a los
pobres, pero para enriquecerse ellos, sin sentido alguno.
Hace 2 días, en la Parroquia de Nuestra Señora del Pilar, en la
Recoleta, depositamos las cenizas de una tía nuestra, era cubana y
dejó su Patria sin nada, siendo de una antigua familia rica de Cuba...
Gracias a Castro, amigo de Chávez, amigo de Cristina...
Mercedes, ¿para qué o por qué estás allí? Apellido no necesitás...
Dinero, tal vez... Fama... Honores... ¿acaso te hacen falta?
¿Tendremos que dejar nuestras cenizas los argentinos, para que unas
pocas personas, que también serán polvo muy pronto, puedan disfrutar
de su borrachera política?
No sé si alguien te leerá esto, o si lo leerás algún día...
Rezo a la Santísima Virgen María, por tu conversión y la de los 40
millones de argentinos, que, misteriosamente, estamos permitiendo,
paralizados, que un pequeño grupo, esté arruinando nuestro pasado,
nuestro presente y nuestro futuro.
Tu primo tercero,
Jorge Casabal Marcó del Pont
Buenos día, Mercedes.
Hace un tiempo chocamos con vos, en la calle y conversamos un minuto...
Te escribo, porque desde que comenzaste tu carrera pública, es decir
desde que empezaste a salir en la tele, hablando de cuestiones
económicas, hace varios años ya, siempre estuve muy orgulloso de mi
prima, Mercedes Marcó del Pont.
Hoy, no puedo decir lo mismo.
Estoy muy triste, por nuestra Patria, por nuestra familia, por nuestro
apellido, que está saliendo en todos los diarios, pero que no sale
entre las buenas noticias.
Te acordás que hace poco estuviste en Vigo, España cuando celebraron
los 250 años de la llegada de Don Buenaventura Marcó del Pont...
Fui yo, el que empecé hace un tiempo, a escribir a Vigo, donde creían
que ya no había parientes de Don Buenaventura...
Estuviste y fuiste agasajada, qué bueno!, me imagino que habrás
sentido gran orgullo de tus antepasados...
Pero, querida prima, algo te ha pasado en tu vida, que te has salido
del camino...
Don Buenaventura padre, y su hijo Buenaventura Miguel, eran
comerciantes espléndidos, devotos de la Santísima Virgen María,
excelentes personas, fundadores de una enorme familia, obedientes del
Rey de España, etc.
Pero, si bien ocupaban cargos públicos o cargas públicas, lo hicieron
defendiendo siempre la libertad de comercio... y así se lo reclamaron
a su Rey.
Hoy, querida Mercedes, te has puesto en otro sitio totalmente contrario.
No se trata ya de defender ideas de izquierda o derecha, se trata de
algo que ha dejado de ser ciencia económica, para pasar a ser pura
prepotencia mentirosa y demagógica.
Ni siquiera podés afirmar que se defiende la causa de los pobres, en
cuyo caso, yo también me adhiero...
Estás defendiendo, la causa de un grupo de lunáticos, que usan a los
pobres, pero para enriquecerse ellos, sin sentido alguno.
Hace 2 días, en la Parroquia de Nuestra Señora del Pilar, en la
Recoleta, depositamos las cenizas de una tía nuestra, era cubana y
dejó su Patria sin nada, siendo de una antigua familia rica de Cuba...
Gracias a Castro, amigo de Chávez, amigo de Cristina...
Mercedes, ¿para qué o por qué estás allí? Apellido no necesitás...
Dinero, tal vez... Fama... Honores... ¿acaso te hacen falta?
¿Tendremos que dejar nuestras cenizas los argentinos, para que unas
pocas personas, que también serán polvo muy pronto, puedan disfrutar
de su borrachera política?
No sé si alguien te leerá esto, o si lo leerás algún día...
Rezo a la Santísima Virgen María, por tu conversión y la de los 40
millones de argentinos, que, misteriosamente, estamos permitiendo,
paralizados, que un pequeño grupo, esté arruinando nuestro pasado,
nuestro presente y nuestro futuro.
Tu primo tercero,
Jorge Casabal Marcó del Pont