Schoklender, complicado por una cuenta millonaria
Schoklender, complicado por una cuenta millonaria
Es por movimientos bancarios de una firma vinculada al ex apoderado de Madres.
- 12/12/11
Por una cuenta de la firma Antártica Argentina -vinculada a Sergio Schoklender- pasaron algo más de $ 5 millones: buena parte de esa cantidad provenía de pagos en cheques realizados por la Fundación Madres de Plaza Mayo. En el seguimiento de la ruta del dinero que envió el Estado Nacional para construir viviendas populares, la investigación de Norberto Oyarbide halló numerosos rastros de sumas millonarias que salieron de la Fundación hacia la empresa que encabezaba Alejandro Gotkin, contador, ex empleado de Madres y mano derecha de los negocios de Sergio Schoklender.
Los investigadores estiman que esa empresa fue creada con el fin de retirar dinero que entraba a la Fundación como parte de pago por las obras realizadas. Schoklender estaba de los dos lados del mostrador, como apoderado de la Fundación y socio de Gotkin.
El informe sobre el circuito de dinero fue realizado por técnicos del Banco Central a pedido de Oyarbide y girado a la fiscalía antilavado que comanda Raúl Plée y que colabora con el fiscal Jorge Di Lello en la investigación acerca de cómo se usaron los más de $ 700 millones destinados a la construcción de viviendas. Antártica Argentina, según informó la Unidad de Información Financiera, se creó en 2001 pero recién abrió una cuenta bancaria en febrero de 2009, cuando Schoklender manejaba la Fundación. En esa cuenta, de febrero a junio de 2009 se depositaron 23 cheques de la Fundación, dos del Instituto de la Vivienda de la Ciudad (IVC) -pagados a la Fundación- y tres de Pablo Schoklender. El menor de los hermanos depositó $ 452.000, la Fundación $ 3.900.000 y el IVC $ 487.000. La mayor parte de ese dinero fue retirada por caja en la sucursal Villa Crespo del Banco Supervielle por el propio Gotkin, quien se llevó $ 4.378.955 en efectivo. Además de Gotkin, hubo otra persona que retiró $ 49.000: Hernán Facundo Martínez, de 30 años, quien aseguró tener domicilio en Álvarez Thomas 198, sede de Antártica Argentina y domicilio fiscal de Sergio Schoklender.
En septiembre de 2009, Gotkin explicó al banco que la empresa tenía como actividad “tareas de importación y puesta en marcha de maquinarias vinculadas a la construcción de viviendas sociales”.
“Sin embargo, no se registran operaciones de pago de importaciones o de comercio exterior a nombre de la sociedad, amén de que la misma no se encuentre inscripta como importador”, señala el informe de Anabella Bernardi e Irene Veisberg, técnicas del Central. Es decir que esa empresa no operaba. Pero movía dinero.
