[FAROagencia] Celebraciones Dieciocho de Julio
Madrid, 19 julio 2006. En el septuagésimo aniversario del alzamiento de Navarra, tomamos como ejemplo, entre las muchas celebraciones que ayer tuvieron lugar del Alzamiento Nacional, una de la Nueva España y una de la vieja: las de Guadalajara, Jalisco, y de Gijón, Asturias.
Guadalajara, Jalisco, 18 julio 2006. Se ha celebrado en conmemoración del Alzamiento español de 1936 una Santa Misa, oficiada por el presbítero Luis Marques bajo el santo rito canonizado por San Pío V, que fue convocada por la delegación de la Comunión Tradicionalista en Méjico.
La intención de la Santa Misa, celebrada en el 70º aniversario de tan gloriosa fecha para la Hispanidad, fue por todos aquellos requetés, especialmente para lo que que habiendo combatido en aquellas fechas todavía sobreviven, como don Eduardo Bustindui Gutiérrez-Solana, Capitán de Requetés de la 1ª Compañía del Tercio de Oriamendi, quien vive en Méjico; pues la Comunión Tradicionalista en la Nueva España recuerda las palabras de S.M.C. Don Alfonso Carlos I de Borbón y Austria-Este cuando, dirigiéndose a don Manuel Fal Conde le expresa que "ante todo debe salvarse la Religión, el País y la Patria…. Agradezco en el alma, a ti y a nuestros heroicos Requetés, por haberos unido a las Tropas de España para batir al comunismo, y te doy infinitas gracias, querido Fal, por haber, siguiendo mis instrucciones, ordenado en el momento decisivo, que nuestros Requetés apoyen el movimiento salvador".
La intención de la Santa Misa, celebrada en el 70º aniversario de tan gloriosa fecha para la Hispanidad, fue por todos aquellos requetés, especialmente para lo que que habiendo combatido en aquellas fechas todavía sobreviven, como don Eduardo Bustindui Gutiérrez-Solana, Capitán de Requetés de la 1ª Compañía del Tercio de Oriamendi, quien vive en Méjico; pues la Comunión Tradicionalista en la Nueva España recuerda las palabras de S.M.C. Don Alfonso Carlos I de Borbón y Austria-Este cuando, dirigiéndose a don Manuel Fal Conde le expresa que "ante todo debe salvarse la Religión, el País y la Patria…. Agradezco en el alma, a ti y a nuestros heroicos Requetés, por haberos unido a las Tropas de España para batir al comunismo, y te doy infinitas gracias, querido Fal, por haber, siguiendo mis instrucciones, ordenado en el momento decisivo, que nuestros Requetés apoyen el movimiento salvador".
Gijón, 18 julio 2006. Como estaba anunciado, se ha celebrado en Asturias el LXX aniversario del Alzamiento Nacional y el comienzo de la Cruzada de Liberación.
En la mañana del martes dieciocho, se llevó a cabo una visita al Santuario de Covadonga y una reunión en Cangas de Onís, en la que miembros de las Juventudes Tradicionalistas Asturianas acompañaron a correligionarios de las Juventudes Tradicionalistas de España venidos de los reinos de Galicia y Murcia, encabezados por el jefe nacional Víctor Ibáñez. Rezaron ante la Santina y homenajearon a Vázquez de Mella ante su busto, con una oración por su eterno descanso.
Por la tarde, a las siete y media, se celebró la Santa Misa en Gijón, en la capilla de la residencia de los Padres Capuchinos, por cuantos dieron sus vidas por Dios y por España. Ofició el Padre Juan María de Montagut, de la Hermandad de San Pío X, quien pronunció un magnífico sermón dedicado al deber de honrar a la Patria, que está incluido en el Cuarto Mandamiento, y a la verdadera paz, que no es la del mundo, y que no es compatible con el Estado laico; recordó a aquellos que en 1936 cumplieron con su deber de luchar, incluso hasta entregar la vida, y animó a los presentes a estar dispuestos no sólo al supremo sacrificio, si Dios así lo demandase, sino a vivir día a día como verdaderos cristianos.
Entre los asistentes había varios veteranos de la Cruzada, entre ellos el delegado local de la Confederación de Combatientes, José Antonio Montero. Estaba también el jefe regional de la Comunión Tradicionalista, Manuel de Vereterra; la Condesa de Revillagigedo, con su hija Casilda; Isidoro Cortina, antiguo jefe de la Policía Municipal; el Coronel Francisco Sánchez de Muniain, de la Asociación de Navarros en Asturias; Aurelio Gabaldón, del semanario madrileño La Nación, con su esposa; la historiadora María Prieto Vergara; las hermanas Serrano Prego, jóvenes margaritas gallegas; la escritora Cecilia Meléndez de Arvas con su marido, el distinguido médico Luis López-Sela Díaz-Faes; el albaceteño Luis Camacho; otros miembros de las organizaciones convocantes, la Comunión Tradicionalista, el Círculo Vázquez de Mella y las Juventudes Tradicionalistas; y muchos otros amigos. Hizo las veces de acólito Luis Infante, de la Secretaría Política de S.A.R. Don Sixto Enrique de Borbón.
A continuación tuvo lugar un aperitivo en una taberna cercana, seguido de una animada cena de hermandad en una sidrería, a la que se sumaron algunos que no pudieron llegar a la Misa, como el médico Pablo García-Argüelles o como Nicolás Martín Bayliss, venido de Madrid para la ocasión. La cena terminó entre brindis y vivas al Dieciocho de Julio, a Cristo Rey, a España y al Rey legítimo.
Además de los medios propios, como el boletín Tradición Astur, se publicó una esquela en el diario El Comercio, así como una gacetilla en La Nueva España de Gijón:
http://canales.elcomerciodigital.com/interactivo/esquelas/necrologicas_060718/esquelas.htm
http://www.lne.es/secciones/noticia.jsp?pNumEjemplar=1338&pIdSeccionfiltered=35&pIdNoticia=425106
El mismo día dieciocho, por cierto, La Nueva España de Gijón publica una entrevista con el guipuzcoano, vecino de esta villa, Valentín Aguirrezabalaga, quien a pesar de cierta confusión propia de la época dice algunas cosas muy sensatas, por ejemplo:
En la mañana del martes dieciocho, se llevó a cabo una visita al Santuario de Covadonga y una reunión en Cangas de Onís, en la que miembros de las Juventudes Tradicionalistas Asturianas acompañaron a correligionarios de las Juventudes Tradicionalistas de España venidos de los reinos de Galicia y Murcia, encabezados por el jefe nacional Víctor Ibáñez. Rezaron ante la Santina y homenajearon a Vázquez de Mella ante su busto, con una oración por su eterno descanso.
Por la tarde, a las siete y media, se celebró la Santa Misa en Gijón, en la capilla de la residencia de los Padres Capuchinos, por cuantos dieron sus vidas por Dios y por España. Ofició el Padre Juan María de Montagut, de la Hermandad de San Pío X, quien pronunció un magnífico sermón dedicado al deber de honrar a la Patria, que está incluido en el Cuarto Mandamiento, y a la verdadera paz, que no es la del mundo, y que no es compatible con el Estado laico; recordó a aquellos que en 1936 cumplieron con su deber de luchar, incluso hasta entregar la vida, y animó a los presentes a estar dispuestos no sólo al supremo sacrificio, si Dios así lo demandase, sino a vivir día a día como verdaderos cristianos.
Entre los asistentes había varios veteranos de la Cruzada, entre ellos el delegado local de la Confederación de Combatientes, José Antonio Montero. Estaba también el jefe regional de la Comunión Tradicionalista, Manuel de Vereterra; la Condesa de Revillagigedo, con su hija Casilda; Isidoro Cortina, antiguo jefe de la Policía Municipal; el Coronel Francisco Sánchez de Muniain, de la Asociación de Navarros en Asturias; Aurelio Gabaldón, del semanario madrileño La Nación, con su esposa; la historiadora María Prieto Vergara; las hermanas Serrano Prego, jóvenes margaritas gallegas; la escritora Cecilia Meléndez de Arvas con su marido, el distinguido médico Luis López-Sela Díaz-Faes; el albaceteño Luis Camacho; otros miembros de las organizaciones convocantes, la Comunión Tradicionalista, el Círculo Vázquez de Mella y las Juventudes Tradicionalistas; y muchos otros amigos. Hizo las veces de acólito Luis Infante, de la Secretaría Política de S.A.R. Don Sixto Enrique de Borbón.
A continuación tuvo lugar un aperitivo en una taberna cercana, seguido de una animada cena de hermandad en una sidrería, a la que se sumaron algunos que no pudieron llegar a la Misa, como el médico Pablo García-Argüelles o como Nicolás Martín Bayliss, venido de Madrid para la ocasión. La cena terminó entre brindis y vivas al Dieciocho de Julio, a Cristo Rey, a España y al Rey legítimo.
Además de los medios propios, como el boletín Tradición Astur, se publicó una esquela en el diario El Comercio, así como una gacetilla en La Nueva España de Gijón:
http://canales.elcomerciodigital.com/interactivo/esquelas/necrologicas_060718/esquelas.htm
http://www.lne.es/secciones/noticia.jsp?pNumEjemplar=1338&pIdSeccionfiltered=35&pIdNoticia=425106
El mismo día dieciocho, por cierto, La Nueva España de Gijón publica una entrevista con el guipuzcoano, vecino de esta villa, Valentín Aguirrezabalaga, quien a pesar de cierta confusión propia de la época dice algunas cosas muy sensatas, por ejemplo:
-Se ha referido usted a Juan Sebastián Elcano...Tantos marinos vascos que llevaron con orgullo la bandera de España por todos los puertos del mundo, que lucharon por ella de corazón, abriendo rutas que han dado tanta gloria a España... ¿En qué momento cree usted que se produjo la ruptura de ese sentimiento?
-Hay quien dice que buena parte se debe al espíritu carlista, pero yo creo que no. Ha influido más Sabino Arana, autor de un montón de disparates.
[...]
Con libertad auténtica, la independencia nunca saldrá adelante.
[...]
-Pues aquí estamos, negociando con ETA...
-Me parece una barbaridad el camino que se está siguiendo para relacionarse con los terroristas, cuando éstos no se han retractado en nada de lo dicho y hecho. El Gobierno actual está cediendo hasta términos inauditos, y hay mucha gente que se ha sentido engañada y traicionada por el poder político, que en definitiva se ha metido en un tipo de proyecto que no demandaba la sociedad.
-¿Cómo cree que acabará la película?
-Pienso que el Gobierno no podrá satisfacer todo lo que está pidiendo ETA, y con ello, ETA quizá hable de cosas que mucha gente intuye, pero que no están contrastadas. Son asuntos muy perjudiciales para este Gobierno, que probablemente lo están convirtiendo en rehén del terrorismo.
-Es usted valiente...
-Decir estas cosas aquí, es fácil; en mi tierra se arriesga más, y eso que ahora hay una tregua, aunque no estoy convencido de que vuelva a ser otra tregua trampa. Sacar el odio de la mente de estas gentes, si lo llevan bien arraigado, no es fácil.
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Agencia FARO
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