Misión Popular en Yako, una experiencia nueva...
Antes de comenzar quisiéramos dedicar la presente crónica al P. Esteban Soler quién fue nuestro compañero de misión por casi 3 años y que por motivos de salud tuvo que viajar a Italia 2 semanas antes de la Misión Popular.
Lo sugestivo del titulo es debido a que a pesar de no ser nuevo para nosotros el trabajo en misiones populares, esta última que hemos realizado lo es en virtud del lugar, la lengua, la gente y otros elementos que pasaremos a contar lo más brevemente posible.
En la semana que fue entre el 13 de junio y el 4 de Julio, tomamos como centro de Misión una de las comunidades de nuestra parroquia llamada Yako. Para esto convocamos la presencia de voluntarios laicos de la parroquia que libremente querrían participar de ella, el total de los sumados fue 60, a quienes hay que agregar 3 Servidoras y 6 seminaristas de 1° y 2° de teología del Seminario Diocesano de Vanimo. En referencia a esto debemos decir que la cantidad de misioneros casi superaba la cantidad de pobladores!
Comenzamos con la misa de apertura y el mandato misionero llevado a cabo por el Obispo de Kimbe Monseñor Alphonse Chaupa (presente provisoriamente en Vanimo); y luego la distribución de trabajos y áreas de misión para los misioneros. El trabajo fuerte comenzó al día siguiente.
Realizamos las actividades propias de las misiones del IVE, visitas de casas, misión de niños, jóvenes, visitas a los enfermos, etc., etc., etc.
Cosas para destacar y que hicieron de esta misión algo nuevo:
- Era tan grande la cantidad de misioneros que decidimos crear el grupo de caridad, quienes se encargaron de arreglar el cementerio, cortar leña para los ancianos y limpiarles las casas.
- En las visita de casas se descubrió que había muchas familias en las que los miembros estaban enemistados por diferentes motivos, entonces se realizó lo que aquí se llama Pasin bilong Sekan, que quiere decir lo siguiente: las dos partes enemistadas (gracias a la labor de los misioneros) se encuentran en la Iglesia y delante del ministro de Dios se dan la mano y todo se olvida. La ceremonia es muy emotiva, el padre reza una oración, da una bendición y luego todos ponen sus manos sobre la Sagrada Biblia y prometen perdón unos a otros. Todos lloran, porque generalmente han pasado muchos años para esta reconciliación, se abrazan y chau. El Señor dice; “bienaventurados los que siembran la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios”.
- Fue un momento realmente emotivo, incluso para el Obispo quien participaba por vez primera de una cosa semejante, cuando quemamos a Satanás en una de las esquinas del cementerio. Después de quemarlo en medio del griterío de niños y adultos, le dimos la espalda y giramos hacia el otro lado de la calle donde el equipo S.W.A.T. de la Misión levantaba imponente la Santa Cruz Misionera que reza: Sevim sol bilong yu (salva tu alma), Misión Popular – 2009 - Yako. Para este momento la gente y nosotros observábamos una vez más el triunfo de la Cruz, a través de tantas confesiones, conversiones y demás gracias que contarlas todas, tornaría la crónica demasiado extensa.
- Otro de los momentos culminantes de la Misión fue cuando una chica, volviendo de una secta a la Iglesia Católica, profesó el Credo después de la homilía del Obispo. Ella recitaba temblorosa y de fondo toda la comunidad musitaba suavemente como haciéndole de soporte y tratando de no imponer sus voces por encima de la de ella. La comunidad la ayudó a profesar su fe nuevamente, y les podemos asegurar que la emoción fue tan grande para todos que se habló de esto por varios días después de la Misión.
- Un grupo fue enviado a un área alejada en la selva, pero que pertenece a esa comunidad. El resultado es que bajaron los católicos de esa comunidad y recibieron, familias enteras, bautismo (los niños, y un adulto) comunión y confirmación. Fueron alrededor de 12 o 15 personas. Al domingo siguiente, cuando celebramos la Santa Misa la mayoría de ellos estaba presente, vale decir que es la primera vez en 3 años que los vemos un domingo en Misa.
- Lo bueno y lo nuevo es que para toda la gente de Yako Village esto fue muy nuevo y muy bueno. Los niños aceptaron sin demora hacer santo lío por las calles junto a las hermanas y los seminaristas, el rosario de la aurora, la adoración a la mañana, la Santa Misa, los fogones, cartuchos, controversias; en este ultimo punto destacamos que al principio se mostraron un poco reacios a participar, pero después del segundo día se peleaban por exponer las objeciones de las controversias.
- Todo el grupo misionero, proveniente de distintas villas de la parroquia (60 personas en total), fue alojado en la villa Yako por las familias del lugar, hecho que favoreció y promovió la concordia entre las tribus, que no es poca cosa en el contexto de nuestra parroquia; esto quiere decir también, que la misión con los misioneros fue totalmente satisfactoria.
- Terminamos con una gran cena para todos los misioneros, preparada por el grupo de mamas católicas que cocinó durante toda la semana para todos. En un ambiente de felicidad por saber que estábamos haciendo lo que Nuestro Señor nos mandó, pudimos mirar las caras de aquellos que tomaron parte de una Santa Misión por primera vez, y a una sola voz, en una lengua sencilla pero sumamente intuitiva ya que deja ver con transparencia el fondo de los corazones que aman a Cristo, todos decían: Mipela i hangre moa long God que lo traducimos al español diciendo: “estamos hambrientos de Dios”.
- Como resultado post-misión podemos decir que aún resuenan en nuestras comunidades en forma de alegría y entusiasmo los efectos de las gracias que Dios ha querido derramar sobre esta pequeña villa del Pacífico Sur; prueba de ello es que a una semana después de la misión unas 70 familias de nuestra parroquia, han decidido tomar en padrinazgo a todos los seminaristas del Seminario Menor y Mayor de Vanimo para rezar por ellos y ayudarlos en sus necesidades (cada familia tomará un seminarista). Nosotros particularmente consideramos esto como una especial gracia que Dios nos ha concedido.
Por eso, queridos todos en el Verbo Encarnado, esto fue para nosotros una experiencia nueva que nos muestra la perenne novedad del Dios vivo y verdadero, que quiere que todo el mundo se salve y llegue al conocimiento de la Verdad…”
Por último queremos agradecer a todos los que nos han ofrecidos sus oraciones, nombrarlos a todos sería otra crónica, solamente sepan que Dios los ha escuchado!!!
En Cristo y Maria Santísima Reina del Paraíso, padres Agustín Ávila, IVE y Emilio Rossi, IVE (PNG).