sábado, octubre 17, 2009

AUTOCONVOCATORIA NACIONALISTA.doc


AUTOCONVOCATORIA NACIONALISTA  - SETIEMBRE 2009-

  Camaradas, hace ya demasiado tiempo que estamos lamentándonos por la situación de nuestra Patria y reconociendo que la misma es cada vez mas grave. Todos los nacionalistas conocemos las causas que han originado este estado de situación y los personajes que han ejecutado las políticas y los que sin ser ejecutivos han acompañado; avalado; promovido y defendido por distintos medios y de distintas maneras, leyes y políticas contrarias a los intereses de nuestra Nación, cualquiera sea el ámbito (léase legisladores, jueces, empresarios, sindicalistas, etc. etc.) Hoy en particular, confluyen varios factores que no solo manifiestan la gravedad de la situación actual sino que permiten avizorar un panorama aún peor a muy corto plazo, ya que estamos en peligro de una disgregación social, sin descartar la posibilidad de enfrentamientos violentos entre hermanos, sin dejar de mencionar la pérdida de territorio, la expoliación de recursos naturales y el total estado de indefensión, todo como producto de un gobierno de mafiosos, delincuentes y traidores a la Patria; de un matrimonio y su entorno, que a la par del enriquecimiento ilícito y desmedido, siguen entregando soberanía, enfrentando a los argentinos con argumentos políticos, ideológicos, económicos y hasta de clases sociales y destruyendo nuestra sociedad de la mano del narcotráfico, la prostitución y la destrucción de la Familia.
Ante esta realidad no podemos y fundamentalmente no debemos quedarnos de brazos cruzados como meros espectadores de la destrucción de nuestra Nación Argentina. El Coronel Seineldín siempre repetía las palabras del General San Martín diciendo: “Cuando la Patria peligra, todo es lícito menos dejarla perecer”. Por ello, por la memoria del Coronel Seineldín y todos los que lo acompañamos en su lucha y la continuamos hasta hoy, por nuestras familias y por las generaciones futuras y porque es nuestro deber Cristiano y patriótico; es el momento de unirnos por sobre cualquier pequeña diferencia y poniendo como interés superior a nuestra Nación. Debe unirnos en ese profundo amor a nuestra Patria que hemos pregonado siempre, para construir el auténtico proyecto nacional y demostrar que somos más los que amamos a nuestra Nación y que tenemos los conocimientos, las ideas y la voluntad para reconstruir la Argentina, que los cipayos que se alternan en el poder.
Jean Ousset, en su libro La Acción, dice: “Hoy de manera urgente tenemos dos caminos para elegir, mantenernos como un recuerdo o como un sector más, lleno de buenas intenciones, o promover un renacimiento profundo de nuestra República, de nuestra Patria. Para mantener un recuerdo, para mantener el relativo fervor de un grupo de seguidores, para intentar si quiera aumentar el número de ellos, hace falta muy poco. Algunas reuniones, algunos boletines, revistas o semanarios. Para ello, la acción puede quedar limitada al esfuerzo de algunas personalidades de relieve que hablen, que escriban, que se dediquen con esmero; contentándose la masa con escuchar, leer y aplaudir; lo cual puede  ser consolador, meritorio y hasta puede llamarse acción, PERO NO CIERTAMENTE UNA ACCION CONQUISTADORA”.
Para promover y lograr un renacimiento profundo de nuestra Patria debemos crearnos el deber de trabajar con eficacia para el triunfo, universalmente salvador, DE LA VERDAD, DEL ORDEN Y DEL BIEN COMUN.
La lucha ciertamente dura desde hace mucho, la falta de sacrificio,  el repliegue sobre si mismo, el desaliento, son fáciles cuando el ejército al que hay que asegurar el relevo, no ha cesado de batirse en retirada y es ahí finalmente donde radica la cuestión. La satisfacción del menor esfuerzo, según el cual nos bastaría con sembrar y como suele decirse, el resto  (entendiéndose la buena o la mala suerte de la cosecha) pertenece solo a Dios. Lo que implica una forma muy libre de interpretar la parábola del Sembrador, la cual, lejos de enseñarnos a descargar sobre Dios el mejor rendimiento de la siembra, hace observar por el contrario, que produce el ciento por uno o se vuelve estéril, según caiga o no en una tierra convenientemente preparada. Por supuesto que debemos confiar en Dios y encomendarnos a él en esta tarea, pero no debemos caer en el pretexto de que Dios puede triunfar con NADA para que nosotros no hagamos NADA (nada conveniente, nada suficiente). Hay en esta evasión sobrenatural (aparentemente edificante) un forma muy hábil de eliminar nuestro grado de responsabilidad por la situación en que se encuentra el país; una forma inadmisible eximirnos del más elemental deber de autocrítica y de preguntarnos si hemos hecho verdaderamente lo que Dios y la Patria esperan de nosotros?
Finalmente, estimados camaradas, hoy más que nunca necesitamos los argentinos repensar, planificar y ejecutar nuevas acciones en el sentido de promover los mecanismos esenciales para que la Patria no pierda su identidad y que no siga profundizándose su desmantelamiento institucional sostenido con las perversas acciones que nos han impuesto.
Desde hace muchos años venimos bregando en distintos ámbitos lucha de sostenimiento de ideal Dios, Patria y familia y muchos de nosotros lo hicimos a través del MINeII –Movimiento por la Identidad Nacional e Integración Iberoamericana que  por el año 1990 se conformó como herramienta contra el invasor internacional en la cárcel  de Caseros por un grupo de patriotas que dejaron todo sus afectos personales para dar todo en defensa de la Nación. Ese grupo liderado por el Señor Coronel Mohamed Alí Seineldín marcaron un camino que había de transitar sin especulaciones, sin mentiras, sin cobardía, sin demagogias, para  entablar una unidad nacional en nuestro Pueblo para hacerle frente al invasor que por entonces se agudizaba y que hoy lo comprobamos como dirigentes bastardos y cipayos que  han facilitado los asentamientos ilegales en nuestras tierras, en nuestra educación, en nuestra cultura, en nuestra economía, en nuestra Fuerzas Armadas, en nuestras Fuerzas de Seguridad, etc, etc. a estos traficantes de  la usura, la descomposición social y la usurpación.
Muchos hombres de gran valor humano quedaron en el camino dejando la vida terrenal para pasar a la vida eterna Celestial y que hoy nos observan desde el Cielo como el Dr. Camilo Matas, el Tte. Coronel Jorge Alberto Cabrera,  el Tte. Coronel Gustavo Martínez Zuviría, el Sargento Verde, el  Cnel. Julio Romero Mundani, el Señor Eduardo Izzo, el Capitán Perul y el Cnel. Seineldín que juntos a tantos valientes civiles como soldados que dejaron su vida en la lucha contra el invasor  subversivo  marxista y nuestros héroes de Malvinas que yacen sus cuerpos en la tierra invadida esperan que nosotros, que hoy nos encontramos como testigos terrenales de la situación nacional, actuemos.
Vamos Camaradas tomemos la digna decisión de  poner nuestro sacrifico al servicio de la Patria. Este llamado es el primer paso para organizarnos  POR DIOS, bajo el amparo de NUESTRA SEÑORA DEL LUJÁN y POR LA PATRIA y así buscar la reconstrucción del MOVIMIENTO NACIONAL.
VAMOS CAMARADAS a trabajar en esta primera instancia difundiendo la intención e invitando a los amigos a la lucha que debemos comenzar con esta auto convocatoria.

Un abrazo
POR UN PROYECTO NACIONAL EN
        DIOS, PATRIA O MUERTE –

JOSE ANTONIO GONZALEZ BUET            HECTOR RAUL VERGARA
                   Concordia Entre Ríos                                Paraná Entre Ríos

Ex miembros del Consejo Ejecutivo del Movimiento por la Identidad Nacional e Integración Iberoamericana –MINeII-

MUY IMPORTANTE
NOTA: Si quiere adherir a la convocatoria, confirmar por esta vía de correo y así poder enviarle el lugar,  fecha, temario y modalidad  de la  REUNION NACIONAL.
Por información: TEL : 0345-154104852