lunes, noviembre 20, 2006

JUAN BAUTISTA THORNE.2da parte.

JUAN BAUTISTA THORNE,

EL SORDO DE OBLIGADO

Por Guillermo A. Lousteau Heguy.

( 2da parte , recomenzando su biografía ).

Las luchas por la libertad americana no les eran extrañas a la familia Thorne: el ingeniero naval Enrique Thorne, padre de Juan Bautista , tomó parte en la de Estados Unidos, contribuyendo a asegurar la independencia del país que vio nacer a su hijo.

Tampoco era la vida agitada para el joven grumete que en 1817 conoció a Buenos Aires, en un viaje alrededor del mundo efectuada por la escuadra norteamericana al mando del comandante Cherte. Fallecido su padre, el joven Thorne solicitó su embarco a su tío, comandante de un barco corsario americano, quien le profetizó un fin trágico. A punto estuvo de acertar varias veces: la primera cuando juntos , en 1822, naufragaron frente a la costa del África, cañoneados por un buque inglés, y el futuro artillero de la Confederación permaneció asido por espacio de 50 horas al palo mayor del navío hundido.

Marinos franceses lo llevaron al puerto del Callao, en donde embarcado como segundo oficial pasó a Brasil, y de allí a Buenos Aires, que ya conocía en otras circunstancias. A ese Buenos Aires dejaría su vida 60 años más tarde,-tenía 18 años cuando llegó- tras ofrendarle su sangre en cuanta oportunidad pudo.

Gracias a los oficios de José. M. Pinedo, se incorporó como voluntario a la Armada Nacional, y con ella hizo su primer viaje a Santa Fe, luego al Japón y China. En marzo de 1825, en vísperas de la primera guerra con Brasil, se incorpora definitivamente a nuestra marina. De allí en adelante, se sumarán a su foja de servicios , nombres heroicos; ya sea contra el Imperio, contra los anglo- franceses, y no le faltarán las batallas contra las fuerzas unitarias, donde él estará del lado del gobierno constituído, “a quien la gran mayoría del país obedecía “.

Patagones, el río Colorado, Martín García, Obligado, Quebracho,Caaguazú, Cagancha, Pago Largo, Sauce Grande, no son sino algunos peldaños de la escalera que llevó a la gloria de Juan Bautista Thorne.

El capitán Ratto ha sostenido que intervino en la acción de los Pozos, y siempre según afirmaciones del propio Thorne, éste se encontraba no en la barca “ Congreso “ de Mason, sino en la “ Chacabuco “ desde el 1º de enero de 1826 hasta el 1º de julio del mismo año.

Contribuye a hacer más verosímil la afirmación de Ratto, cuando ningún otro historiador la ha compartido- si bien nadie hasta ahora la ha negado- y él parte de la base de suposiciones y de una supuesta certificación de servicios que no hemos podido encontrar ,y sobre la cual no da datos concretos.

Estando a bordo del “ Chacabuco “ – aspirante de 1º- tuvo lugar la primera acción de guerra para la Armada Argentina, y su iniciación no podía ser sino algo de la naturaleza de lo que ocurrió en Carmen de Patagones. La Nación empeñada en una guerra con el Imperio parecía ofrecer a éste una fácil presa en dicha localidad. No contaron con el carácter de los hombres que enfrentaban.

Jorge Bynnon regresa con la Chacabuco “, luego de un crucero con la “ Sarandí “, de Brown. Frente al puerto se hallaban tres naves recientemente capturadas al Brasil ( “ Bellaflor “, “ Emperatriz “ y Chiquinna” ) juntamente con las “ Oriental Argentino “, “ Hijos de Julio ” e “ Hijos de Mayo “. El orgullo brasilero y el deseo de revancha los impulsaban a intentar el rescate de sus barcos.

La flota agresora estaba compuesta por el “ Duquesa de Goyaz “, “ Escudeiro “, “Itaparica “ y Constanza “. El primero encallará el 28 de febrero y será destruida por el mar, y el Itaparica “ dará a Thorne sus primeros galones de comandante. En Escudeiro “ será su próximo destino, rebautizado con el nombre de “ Patagones “, en recuerdo de la lucha.

La nota emocionante de la jornada la constituye el abordaje del Itaparica “. Ratto y Teodoro Caillet Bois coinciden en atribuir la iniciativa a Thorne, que domina de esa manera a una tripulación de 120 hombres, como era el buque imperial. El fracaso de estas fuerzas es total. No sólo desde el punto de vista moral , sino que la pérdida de 28 cañones, 30 oficiales, 600 soldados y siete banderas es un rudo golpe para su potencia material.

Ya en el “ Patagones “, ex “ Escudeiro “ , que comandaba su compatriota Love, volverá a infligirle agravios a los portugueses ( dos presas en pocos meses ) que estos se cobrarán, capturando por primera vez un barco nacional. Pero ello no sucederá sin que los marinos al servicio argentino vuelvan a dejar sentado que sus derrotas se venden caras, aún en desventajas como las que suponen enfrentar a esta pequeña barca, con el “ Imperial Pedro II “, y su poderosa artillería. Love pierde la vida en la batalla y Thorne sufrirá prisión, luego de ser herido cinco veces, todo por mi patria argentina “ según sus propias palabras.

En prisión permanece hasta la paz, y su vuelta le permite relacionarse con otro marino de su calibre: Leonardo Rosales, que comandaba la “ Sarandí “.

A partir de entonces su primera misión importante lo constituye la Campaña del Desierto, al mando de Rosas , y que le valdrá la Medalla de Honor, por su desempeño a bordo de la “ Sofía “ y “ Margarita “ en el río Colorado.

Thorne sigue desempeñándose siempre como marino que fue, dado que sólo por excepción actuó en tierra- siempre como artillero, que tal era su especialidad- y por razones de falta de elementos.

Así lo explica Caillet Bois: “La honda discordia que tenía dividida a la familia argentina, no podían menos que dividir también a los marinos que se cubrieron de gloria en las pasadas guerras. Algunos como Thorne, Alzogaray, Bathurst, Toll, Etc., guardan fidelidad al gobierno que detenta la autoridad constituida y a quien obedece la mayoría de la Nación. Y cuando la Confederación no tiene barcos, sóbranles en tierra combates donde prodigar su sangre en buena lid “.

Su primer destino en tierra es como segundo de Martín García. Ya era otro el enemigo, otra la potencia que veía en el Río de la Plata sólo medios para su expansión: la Francia, que había alentado sus intenciones colonialistas en San Juan de Acre. A ellos unidos los unitarios de Montevideo, intentaron doblegar nuevamente al gobernante argentino que se constituye en defensor de la Soberanía.

( Continuaremos en 3ra. Etapa con el ataque a la Isla de Martín García .El Director.)