GLADIUS 66 La soberbia...5ta parte.

GLADIUS 66. DE LA SOBERBIA A LA IDEOLOGÍA.

P. RAMIRO SÁENZ.

(Continuación …5ta parte. )

4.LOS PECADOS SOCIALES.

Otra dimensión especial del pecado que hay que considerar es la social. Modernamente se habla de “ estructuras de pecado “-Así, por ejemplo en la encíclica Evangelio vitae , refiriéndose al aborto, dice que “ estamos ante lo que puede definirse como una “ estructura de pecado “ contra la vida aún no nacida” ( 59 )-, “ pecados colectivos “ o “ pecados sociales “-Ver especialmente Juan Pablo II, Ex.Ap. Reconciliato et Poennitentia,16.- Dejando de lado la interpretación ideológica de la expresión, que niega la naturaleza personal del pecado para depositarla en la sociedad como sujeto, le cabe el sentido correcto. Se trata de aquellos pecados que, por la acción positiva de algunos, la aceptación de la mayoría y la excesiva tolerancia de otros, se han hecho hábitos sociales . Más aún. Se ha hecho “ cultura “ en la sociedad e incluso tales costumbres , hechas ley, el divorcio, aborto , control de la natalidad , relativismo moral ,igualación de todos los cultos , determinación por consenso el bien de la sociedad, libertad sin límites, política y escuela laica, etc.( Lo destacado en negro es atrevimiento del Director ) Entonces lo malo ya no parece tan malo y incluso nos parece bueno y normal , llegando a llamar bien al mal y mal al bien ( Is. 5,20 ). Así “ se engendran estructuras injustas que hacen ardua y prácticamente imposible una conducta cristiana, conforme a los mandamientos del Legislador Divino “ – Catecismo de la Iglesia Católica, nº 1887.- Santo Tomás habla de la situación de extrema gravedad que se presenta en el “peccatum multitudinis “ o “ quando tota multitudo peccat “-II-II,108.1.5 ob. y ad 5 – y los castigos que debería aplicar la sociedad a imitación de Dios como lo hizo con los Egipcios ( E 14,22 ), los sodomitas ( Gen 19, 25 ) , los adoradores del novillo ( Ex.32, 27-28 ), la idolatría de Israel ( Nm.25,4 ).

Cuando estas faltas de justicia no son sancionadas por la sociedad y quedan impunes , se dice en la Sagrada Escritura que “ claman al cielo “, como Abel ( Gn.4,10 ) o el de los Egipcios ( Ex. E, 7-10 ). Y dice San Agustín : “ Tal iniquidad en lo0s divinos libros es llamada “ clamor “… porque so sólo no se castigaban ya entre ellos aquellas torpezas, sino que se celebraban públicamente como por ley “- Enquiridion de fide,spe et caritate, 53.-

A estos hábitos sociales se los puede aplicar lo que Santiago Ramírez observaba de los personales : “ Los hábitos contienen en sí toda la vida humana, esto es , la pasada, la presente y la futura “- De habitibus in común, I, p.5-6,C-S-I-C- La pasada, porque un hábito se engendra por repetición de actos ; la presente porque se obra con prontitud y felicidad respecto a su objeto ; futura, porque tiene cierta estabilidad. Esta inercia de los hábitos sociales será para su mayor bien o mal.

Hablar de pecados sociales es entrar directamente en el tema del “ mundo “, de amplio desarro9llo evangélico, especialmente en San Juan 13-17. Tales pecados sociales tienen un “ exacerbamiento inteligente “ que no puede explicarse sino por la presencia de una “ cabeza perversa e inteligente “, a quien Cristo llamó el “ príncipe de este mundo “. ( Jn.12,31 ).

II. LA IDEOLOGÍA.- Vid especialmente J A Window, El hombre, animal político, APC. Guadalajara, México- Nueva Hispanidad. Bs. 2001; C. Masini Correas, El renacer de las ideología, idearum, Mendoza 1984.-

1. ¿ Qué es la ideología ?.

No es lo mismo que doctrina o conjunto de ideas o principios, propios de una cosmovisión. En este sentido se podría hablar de la ideología cristiana, musulmana o griega. Estamos hablando de ideología en el sentido moderno de la palabra que pasaremos a definir.

El concepto nace a fines del siglo XVIII en Francia por obra del empirista Antoine Destutt de Tracy ( 1754- 1836 ). El se refería a una presunta ciencia que estudiaría el origen de las ideas a partir de las disposiciones del sujeto, de la cultura o de la historia. El intento mismo ya lo acusa de una clara concepción positivista. Es decir, un hecho espiritual , propio de la inteligencia que conoce ( o yerra ), quiere ser explicado como un epifenómeno de elementos o acciones materiales, única dimensión de las cosas para ellos. De todas maneras el tema había sido ya considerado en sus justas exigencias por la gnoseología, parte de la antropología, en los estudios clásicos. Precisamente dentro de este campo es donde vamos a analizar este fenómeno del pensamiento y del comportamiento humano.

Como todos los fenómenos sociales, no ha aparecido de golpe en la sociedad. Ha sido necesario un largo y complejo itinerario. Para hacer desde ya una aproximación , podemos decir que como hecho histórico tiene una expresión manifiesta a fines del siglo XVIII con la Revolución Francesa, Luego, con los lógicos avances y retrocesos, se consolida como doctrina filosófica y político-social en los grandes sistemas que se han conocido hasta ahora. Tales como la ideología liberal, la nacional-socialista, la socialista-marxista y la tecnocrática. Habría que agregar hoy las ideologías religiosas ( Moon, Testigos de Jehová, New Age ). Especialmente con el marxismo-leninismo parece haber llegado a cierta madurez. “ El sistema que ha dado el máximo desarrollo y ha llevado a sus extremas consecuencias prácticas esta forma de pensamiento, de ideología y de praxis, es el materialismo dialéctico e histórico, reconocido hoy como el núcleo vital del marxismo “, afirma Juan Pablo II- Encíclica Dominum et vivificantem,56.-.

Para entenderlo mejor debemos hacer algunas aclaraciones.

1) Como en el orden moral individual, hay hábitos buenos o malos que no aparecen repentinamente. Suponen un proceso. En este caso, de descomposición social .Este deterioro se va produciendo en todos los campos que afectan la conducta humana : filosófico, educativo, político, artístico, etc. En unos la corrupción es más bien intelectual, en otros es la docilidad para el mal y la incapacidad de reacción. En el todo social, una pérdida de hábitos que hace posible la aparición del hombre masa. El hombre sin principios de vida, ni articulación , ni virtudes. El hombre amorfo capaz de someterse a toda clase de directivas sin reacción y hasta con cierto gusto. En realidad, entre las promesas de los profetas de la ideología con su lenguaje pseudo- religioso y la docilidad del hombre sin forma hay una profunda sintonía. Son los “ maestros conforme a sus pasiones “ ( 2 Tim 4,3 ).

2) 2) Nunca se encuentran las ideologías químicamente puras . Sea por la resistencia de las tradiciones en contrario o por la misma naturaleza , suelen encontrarse muy matizadas. El ejemplo de la Revolución Francesa con sus cuatro etapas en las que una aniquilaba la anterior, o el más reciente de la Unión Soviética, hacen ver que en un estado puro sólo se encuentran en la mente de los ideólogos.

3) Más que un conjunto de ideas y doctrinas comprensibles por una élite, que también lo es, habría que hablar de una mentalidad ideológica, que hoy constituye un verdadero espíritu de los tiempos .Hoy encontramos en la calle al hombre común con estos hábitos. Lo que hacen prever que fácilmente caerá en la primera propuesta ideológica que se le presente. Especialmente los jóvenes, desprovistos de formación, ávidos de todas novedades y promesas, suficientemente faltos de experiencia y con capacidad de enrolarse en cualquier aventura utópica.

4) Para entenderla mejor, podríamos definirla fenomenológicamente por estos cinco elementos.

( continuaremos con 1) Relativismo…6ta parte. El Director )