sábado, marzo 03, 2007

Bahía Blanca





Bahía Blanca • República Argentina viernes 2 de Marzo de 2007
EDITORIAL

Crítica

Un diluvio estropeó el cotillón y dispersó la clientela que Néstor Kirchner había mandado a sus capataces reunir en Plaza del Congreso, para agasajarse al salir de su mensaje anual ante las Cámaras.
Pero la tormenta siguió adentro del palacio, por la virulencia con que el mandatario opacó el informe, que pretendía ser objetivo, acotando cada párrafo con un ataque contra sus críticos, al margen del texto... Y en especial al periodismo. ¿Qué pretende, una prensa aduladora de su gestión?
Para eso están las oficinas de prensa del Estado y la propaganda de sus alquilones, esos intendentes suburbanos y esos piqueteros subsidiados que seguían afuera esperándolo bajo las marquesinas.
Pero el deber del periodismo es decir "todo el mal que se hace en el país y todo el bien que no se hace"; en suma, ejercer la crítica cada cual a su leal saber y entender.