miércoles, agosto 05, 2009

Audiencia penal

"Tuve el honor de conocer al Gral Veresplaten en AUNAR , en la Capital Federal hace unos años,me pareció un hombre íntegro y soldado valiente.
El Director "

Posiblemente muchos de Uds. recibieron este testimonio de Carlos Bosch sobre
la audiencia en el TOF 2 de San Martín. Tambien estuvieron con nosotros
Emilio Hardoy y Félix María Dufourq. Fue realmente impresionante el
ejercicio de la venganza, la cara patibularia de los jueces especialmente la
presidente de la Sala y la de los abogados de la querella, la situacion del
Gral. Veresplaten tendido en una camilla y con los ojos perdidos, la lectura
de las pericias médicas sobre su estado.


Solanet, Gradin y este servidor fuimos a la audiencia donde se juzga a los
Grales Riveros, García y Versplaten. Desgraciadamente empezó una hora tarde
y debimos retirarnos a las 12.

En la espera trabamos relación y charlamos con muchos de los presentes,
militares, entre ellos el hijo del Gral García quien nos relató: 1º) que
estos ancianos son conducidos -como sabemos- al tribunal en condiciones de
enorme dureza, son encerrados en una especie de celda al lado de la sala de
audiencias, allí deben esperar horas sin que se les de ni un vaso de agua ni
una taza de café (que mientras tanto empleados, policías y jueces toman a
discreción) y cuentan con un baño en tal condición de suciedad que los
parientes van a limpiarlo llevando ultensillos. 2º) Nos relató una de esas
odiseas del Gral en pleno invierno, en la que despues de todo ese
tratamiento, lo llevaron hasta la parte posterior de un camión policial,
cerrando sus puertas e impidiendo que nadie lo acompañase, y luego lo
condujeron hasta una sala (creo que era en M Paz) donde lo hicieron pasar
noche en un camastro sin una sábana ni nada para taparse. 3º Cuando estos
hombres vuelven a M Paz, pese a las condiciones del lugar, es para ellos el
regreso al hogar gracias al afecto de los camaradas

Como presidenta del tribunal operaba una bestia. Una mujer de rostro
caballuno, agresiva hacia los defensores a quienes interrumpía de vez en
cuando con tono perentorio y exigente. Manifiestamente una simpatizante de
la causa terrorista y que odia a los detenidos.

Oímos la palabra de dos defensores, creo que ambos defensores oficiales, que
hablaron muy bien, con claridad y precisión y, dentro de lo posible,
enfrentaron la agresividad de la presidenta.

El primero de ellos puso de manifiesto las condiciones mentales y físicas
del general Versplaten y la imperiosa necesidad y pertinencia de que se
termine con el sistema carcelario actual que le causa perjuicios manifiestos
y carece de sentido. Citó pericias y citó normas.

El segundo completó el alegato centrandose en la falta de pruebas de la
acusación, respecto de lo cual aludió a los cambios de los dichos de ciertos
testigos principales que demuestran claramente su falsedad.

Realmente, valio la pena palpar de cerca cómo se llevan estos juicios
canallezcos.

Saludos