lunes, mayo 28, 2012


Fuga de depósitos en dólares y en pesos mientras se escapa el blue

mayo 16, 2012
By Guillermo Cherashny
La nueva corrida cambiaria y bancaria se insinuó con la confiscación de Repsol-YPF y otros hechos sensibles para los mercados, como la persecución político-judicial a Carlos Pedro Blaquier, posiblemente el empresario más emblemático del establishment. Pero hubo otros dos hechos que montaron el escenario. El primero fue la llegada entre marzo y abril de la recesión con inflación, que bien puede terminar en un estancamiento con inflación, o sea, la estanflación. A esto se le agrega que los sojeros están acumulando la oleaginosa en los silos bolsa y entonces no aportan los dólares que está esperando el gobierno, que tiene un dólar de $ 4,46 con 35% de retenciones contra un dólar blue de entre $ 5,50 y 5,63. Como esta disparidad no puede durar mucho tiempo, el final previsible sería un desdoblamiento cambiario como planteó Axel Kicillof hace un año. Las miradas convergen ahora hacia el joven economista, quien junto a Guillermo Moreno asesora a la presidente, que está a punto de partir hacia Angola en una misión irrelevante mientras repite que se nos cayó el mundo encima, refiriéndose a la crisis griega y al tembladeral de España e Italia.
Psicosis
En definitiva, Cristina no entiende que los controles cambiarios que comenzaron el 31 de octubre pasado ya están agotados. Los inversores se dieron cuenta de que al gobierno le faltan dólares y pesos, esto último por el abultado rojo que tienen las provincias, que no puede subsanarse sólo con la reforma de la carta orgánica del BCRA. En cuanto a los dólares, las medidas implementadas por Moreno frenando importaciones llevaron la economía a la recesión y a una caída muy grande del consumo en shoppings y supermercados. Pero a diferencia de lo ocurrido en el 2009 cuando el PBI cayo el 3% con inflación del 13%, este año con una inflación cercana al 27% los salarios, aun los de convenio, no alcanzan para llegar a fin de mes. Así como el gobierno obtuvo el 54% de los votos porque la situación economía era buena en octubre, ahora pasa lo contario y la imagen presidencial está en el 40% y puede bajar. Entonces, el público está retirando los depósitos en pesos para comprar los dólares blue, que se dispararon ayer y que parece que no pararán hasta llegar a $ 6. La comprensible psicosis hace que también se retiren los dólares de los depósitos y cajas de seguridad por temor a que el gobierno, que está desesperado, se los confisque.
A esta situación se le agrega la salvaje interna entre el cristinismo y Daniel Scioli, que genera más miedo en una sociedad que quiere proteger sus ahorros. La conducta de la presidente no ayuda a calmar los nervios. Ella se rodea de los jóvenes de La Cámpora, rompe con el establishment, el sindicalismo, el peronismo y se va aislando cada vez más. Todo esto se combina con las restricciones económicas forzadas por la desastrosa situación de un modelo económico que ya está agotado.