lunes, abril 11, 2011

Solicitar publicación de una carta a los lectores

UN MILITAR DESTACA LA
VOCACIÓN ADULATORIA DE BALZA

Buenos Aires, Abril 04 de 2011
Señor Director

De mi mayor consideración:

Tengo el honor de dirigirme a Ud. con la finalidad de solicitarle la publicación de la carta que redacto a continuación.

Sin otro particular lo saludo atentamente,

Emilio Guillermo Nani
Teniente Coronel (R)
Veterano de Guerra
L.E. 4.526.260


Actitudes bastardas

He leído, con una mezcla de asco y repugnancia, el nuevo libelo del embajador político Martín Balza publicado en el diario Clarín del 03/04/11, bajo el título “Malvinas fue una causa justa en manos bastardas” en el que, una vez más la emprende contra todos aquellos a los cuales aduló en forma harto obsecuente durante su tránsito al generalato.

Es una pena que haya esperado tantos años para exteriorizar el desprecio que sentía hacia quienes hoy critica con tanta vehemencia y dudosa valentía, aprovechándose de la circunstancia de que muchos de ellos están muertos o presos, es decir sin posibilidad alguna de defenderse.

Si pensaba lo que hoy dice –que eran y son cobardes, inmorales o bastardos- ¿por qué no actuó con honor, responsabilidad y hombría, cuando todos estaban en actividad --tanto él como quienes son víctimas de sus diatribas-- solicitando la conformación de los correspondientes Tribunales, tanto de Honor como de Justicia Militar, para juzgar lo que él consideraba deleznable?.- Dicho de otra forma, otra cosa hubiera sido si todo lo que hoy dice, tuviera su respaldo en caballerescas y honorables presentaciones en el momento de producirse los hechos que hoy cuestiona.- Dejo al lector la calificación que le cabe al otrora militar y actual político, por no haber actuado de acuerdo a las enseñanzas Sanmartinianas, por cuanto lejos de ello, cada vez que pudo actuó con excesiva subordinación, rayana en la obsecuencia.- Conozco al embajador político cuando era militar y he sido testigo presencial de sus excesivos deseos de agradar a sus superiores, algunos de ellos hoy víctimas de su lengua impune, porque como dije, no pueden impedir los ataques arteros de su ex sumiso subordinado.

El pudo haber desobedecido las órdenes o al menos pudo cuestionarlas.- No sólo no lo hizo sino que, en una actitud propia de los ambiciosos desmedidos, las alabó y respaldó, exigiendo de sus subordinados el fiel cumplimiento de las mismas.

A la luz de lo que hoy expresa --y parafraseando lo extraído del Informe Rattenbach citado en el artículo publicado en el diario de su digna dirección-- con su actitud el embajador político deja en evidencia haber “confundido -con premeditada intencionalidad- un objetivo circunstancial, subalterno y bastardo”: su futuro profesional.



Emilio Guillermo Nani
Teniente Coronel (R)
Veterano de Guerra
L.E. 4.526.260