viernes, enero 22, 2010

Combate de La Tablada: 23 de enero de 1989

Amigos:
Breve homenaje a los Hèroes del Combate de la Tablada mas un "aviso" que pasò Gonzalo Fernandez Cutiellos:

Sabado 23 Ene 2010; 20:00hs; en la Iglesia Santa María de Luján (ex castrense), en Cabildo 425 - CABA

La familia del Tcnl (PM) HORACIO FERNANDEZ CUTIELLOS rezará Misa por su memoria; quienes nos deseen acompañar serán bienvenidos. (por favor abstenece de expresiones políticas, muchas gracias)

Aprovecharemos la ocación para recordar a los caidos del asalto.

PMA

Ataque y compamiento del Regimiento de Infantería Mecanizado 3 General Belgrano
y del Escuadrón de Exploración de Caballería Blindado 1

La Tablada el 23 de enero de 1989

El 23 de enero de 1989, siendo las 06:15 hs. un grupo de aproximadamente 45/50 personas, entre las cuales se incluían varias mujeres, irrumpió en los cuarteles de la unidad y subunidad señaladas, tras embestir y derribar el portón de entrada de la guarnición, utilizando un camión de transporte de gaseosas –que había sido robado minutos antes– y cinco o seis automóviles. En dicha operación inicial fue asesinado el soldado apostado en esa entrada sin que tuviese la oportunidad de hacer uso de su arma reglamentaria. Acto seguido fue tomado el local de la guardia de prevención, permaneciendo en él varios subversivos, mientras el resto ingresaba con los vehículos al interior del cuartel.

En esta operación participaron dos grupos debidamente identificados: uno que ingresó al cuartel en la forma ya indicada y otro, no identificado, que actuó fuera de las instalaciones militares, en actividades de hostigamiento (francotiradores), como así también en agitación popular y apoyo sanitario, llevadas a cabo por personal mimetizado entre la población civil que rodeaba a los cuarteles.

Las acciones posteriores tuvieron como objetivos prioritarios, además de la tarea inicial de la guardia de prevención, apoderarse de las instalaciones de la plana mayor de la unidad de infantería, los casinos (oficiales y suboficiales) y una o más subunidades, con la finalidad de sustraer armamento y municiones.

Inicialmente sólo pudieron concretar la toma del edificio de la plana mayor, donde fue asesinado el 2do. jefe del Regimiento 3, mayor Horacio Fernández Cutiellos y del casino de suboficiales, en el que mantuvieron como rehenes un número importante de suboficiales y soldados.

Debido a los escasos efectivos que se encontraban en el cuartel como consecuencia de la licencia anual y a la hora en que se produjo el ataque, oportunidad en que el personal aún no había regresado del franco de fin de semana, el grupo terrorista logró el copamiento de la unidad militar en un reducido lapso, explotando el factor sorpresa y la capacidad de fuego con que contaban.

El concepto de esa operación, planeada y comandada desde fuera de las instalaciones militares por Enrique Gorriarán Merlo, fue claramente determinado por la documentación secuestrada durante y después de las acciones de recuperación de las instalaciones militares, entre la cual se encontraba la proclama inicial que pretendían difundir por emisoras radiales, previo copamiento de éstas; una segunda proclama en la cual se instrumentaba un plan de emergencia luego que el "gobierno del pueblo" accediese al poder.

En dicho plan se incluía la disolución de las FF. AA. y su reemplazo por las milicias populares; por último, una serie de comunicados en los cuales se detallaban las organizaciones políticas, gremiales, estudiantiles y educacionales que se adherían al movimiento insurreccional subversivo y a la toma del poder nacional.

Consolidada la primera fase de la operación (toma del cuartel) comenzaría la fase agitación popular con la ayuda de altavoces que poseía el grupo de apoyo externo, justificando su actitud de que la toma de la unidad militar era para desalojar a rebeldes adictos al ex teniente coronel Rico y al coronel Seineldín que tenían el propósito, según el grupo subversivo del Movimiento Todos por la Patria (MTP), de dar un golpe de estado. Para ello, los terroristas tenían impreso una gran cantidad de falsos volantes en los cuales los citados militares llamaban a la rebelión contra el Gobierno de la Nación. Dichos panfletos también fueron secuestrados al grupo atacante junto con el resto de la documentación ya indicada.

A partir de lo planificado y con posterioridad a la toma del cuartel, la agitación popular que pretendían lograr estaba destinada a convocar una marcha multitudinaria, desde varios puntos de la Capital Federal, Gran Buenos Aires y aun del interior del país, para dirigirse a Plaza de Mayo y ocupar la Casa Rosada. Ésto se haría para evitar el supuesto golpe de estado de Seineldín y de Rico.

Si esta operación hubiera tenido éxito, igual actitud se habría adoptado en otras zonas del país, particularmente en Rosario y Córdoba, lugares donde se comprobó que existían grupos similares al que actuó en La Tablada el 23 de enero.

La reacción inicial de la Policía de la Provincia de Buenos Aires que de inmediato estableció un cerco de las unidades tomadas, y el progresivo regreso de personal franco destinado a la unidad y subunidad del cuartel que por la parte posterior accedió al empleo de algunos vehículos blindados estacionados en las instalaciones correspondientes, impidieron concretar la parte inicial del plan subversivo previsto que, sintéticamente, consistía en tomar la unidad, apoderarse de armamento y munición, distribuir los supuestos panfletos de Seineldín y Rico y posteriormente retirarse del cuartel para iniciar la segunda fase: agitación popular.

A esta altura de los acontecimientos, encontrándose cercados los elementos subversivos, el Estado Mayor General del Ejército, con autorización del Sr. presidente de la Nación, Dr. Raúl Alfonsín, ordenó el traslado y posterior empleo de efectivos militares y de Gendarmería Nacional bajo las órdenes de un comando unificado, en la persona del general de brigada Alfredo Arrillaga, quien se desempañaba como Inspector General del Ejército.

Las acciones militares se llevaron a cabo durante todo el día 23 y hasta las 10:30 hs. del día 24 de enero, oportunidad en que, ya abatidos la mayor parte de los subversivos que siguieron combatiendo hasta la hora indicada, se materializó la rendición de 14 de ellos, uno de los cuales (una mujer) falleció a los pocos minutos como consecuencia de las heridas recibidas. Junto con esta rendición se produjo la liberación de los rehenes (suboficiales) que mantenían en su poder los integrantes del MTP que aún permanecían con vida.

Por expresa orden del Presidente de la Nación, el personal detenido fue puesto a disposición del juez federal correspondiente, Dr. Larrambebere, quien de inmediato se hizo presente en el lugar de los hechos.

El saldo de muertos de propias tropas fue de nueve integrantes del Ejército Argentino y dos de la Policía de la Provincia de Buenos Aires. La cantidad de heridos y mutilados alcanzó a treinta y siete hombres, algunos de ellos de suma gravedad y otros con lamentables mutilaciones corporales (pérdida de ambas piernas, pérdida de un ojo, etc.).

La identificación de muertos y detenidos, secuestro de documentación, armamento y munición utilizada -en su mayoría de origen ruso y chino- y gran cantidad de bibliografía y material ideológico capturado a los subversivos, permitieron determinar fehacientemente que el grupo, integrado en su mayoría por el Movimiento Todos por la Patria (MTP), era un desprendimiento del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), liderado por Enrique Gorriarán Merlo y con la participación, en este operativo, de elementos pertenecientes a las siguientes organizaciones:

• Partido de la Liberación (PL)

• Movimiento de Liberación 29 de Mayo (ML-29)

• Montoneros (Columna Sur-Oeste)

Mayor Horacio Fernández Cutiellos (h)

Nació el 27 de setiembre de 1951, en la provincia de Corrientes. Ingresó al Colegio Militar de la Nación el 1º de marzo de 1968, y egresó como subteniente de infantería el 17 de diciembre de 1976. Cursó la Escuela Superior de Guerra de donde egresó como Oficial de Estado Mayor. Además tenía la especialidad de paracaidista militar.

Estaba casado con la señora Liliana Inés Raffo y era padre de cuatro hijos.

Su último destino fue como 2do. jefe del RI Mec. 3, lugar donde fue asesinado el 23 de enero de 1989. Fue ascendido post mortem al grado de teniente coronel.

Ni bien se inicia el ataque al cuartel, el mayor Fernández Cutiellos, que había pernoctado en la plana mayor de la unidad, al tomar conocimiento de lo que estaba ocurriendo comienza a disparar contra los subversivos que podía observar. Esta actitud llevada a cabo desde la jefatura de la unidad, impidió la toma de la compañía comando y del edificio de la plana mayor.

Siendo aproximadamente las 07:20 hs. logra comunicarse con el jefe del regimiento, teniente coronel Jorge Luis I. Zamudio y le informa que el ataque al cuartel está siendo llevado a cabo por elementos subversivos. Dicho jefe, desde su domicilio, se comunica telefónicamente con el CENOPE (Centro de Operaciones del Ejército del EMGE) enterándolos de la situación y de inmediato se traslada a la zona del cuartel. Conjuntamente con otros oficiales y suboficiales que regresaban de franco ingresan por los fondos del cuartel para intentar la recuperación. En horas de la tarde, aproximadamente a las 14:30 horas, el teniente coronel Zamudio mientras intentaba reconocer a pie la entrada lateral del casino de suboficiales, ocupado por los subversivos, es herido gravemente por un disparo en la espalda.

Mientras estas acciones se llevaban a cabo el mayor Fernández Cutiellos efectúa desplazamientos para poder continuar el fuego hacia la guardia de prevención, en poder de los subversivos. Encontrándose en la entrada principal de la jefatura, que da a la plaza de armas, fue alcanzado por un disparo en la espalda, cayó hacia adelante, donde fue ultimado por un disparo de Itaka en el rostro. Con su actitud había impedido, hasta el momento de su muerte, que los terroristas accedieran al edificio de la jefatura, donde se encontraba el centro de las comunicaciones alámbricas y radiales
"Yo voy a morir defendiendo el cuartel, ustedes recupérenlo".
Teniente Ricardo Alberto Rolón

Nació en la ciudad de Buenos Aires el 11 de diciembre de 1963. Ingresó al Colegio Militar de la Nación el 16 de febrero de 1982, y egresó como subteniente de infantería el 13 de diciembre de 1985.

En el grado de teniente realizó el curso de comandos obteniendo dicha especialidad.

Su último destino fue la Compañía de Comandos 601 con asiento en Campo de Mayo.

Fue ascendido post mortem al grado teniente 1ro.. El citado oficial era de estado civil soltero.

Durante la noche del 23 al 24 de enero, aprovechando la oscuridad, el teniente Rolón conjuntamente con personal de su compañía, utilizando un vehículo blindado logran acercarse al casino de suboficiales, último reducto de los terroristas que aún combatían. Logran acceder al primer piso y al tratar de irrumpir en el dispositivo de los subversivos es descubierto y abatido por un nutrido fuego de armas portátiles. Su cuerpo gravemente herido es recuperado por el personal que lo acompañaba y evacuado al Hospital Militar Central, donde fallece.
Sargento ayudante Ricardo Raúl Esquivel

Oriundo de la provincia de Santa Fe había nacido en la ciudad de Rosario, su último destino fue el Colegio Militar de la Nación.

Estaba casado con la señora Ana María Bessone y tenía un hijo. Fue ascendido post mortem al grado de suboficial principal

En oportunidad que se trataba de recuperar una compañía en poder de los subversivos, el sargento ayudante Esquivel participaba de dicha acción. Ante la imposibilidad de que una ambulancia que transportaba dos heridos pudiese cruzar la zona en la cual se estaba combatiendo, el citado suboficial se hizo cargo de dicho traslado al puesto de socorro, circunstancia en que recibe un disparo que le ocasiona la muerte.
Sargento Ramón Waldimiro Orué

Nació en la provincia de Formosa. Tenía la especialidad de comando y al producirse el hecho en La Tablada revistaba en la Compañía Comando 601 con asiento en Campo de Mayo, subunidad que participó activamente en la recuperación de las instalaciones

Era casado y no tenía hijos. Fue ascendido post mortem al grado de sargento 1ro.

El sargento Orué formaba parte del cerco instalado en la noche del 23 al 24 de enero, alrededor del casino de suboficiales donde aún permanecía un importante grupo de terroristas tratando de resistir el ataque de propia tropa. Dos subversivos tratan de huir del lugar, el sargento advierte la maniobra, los intercepta y se produce un intercambio de disparos. Los dos delincuentes terroristas son abatidos y el sargento Orué es herido de gravedad. Se lo trasladó al Hospital Militar Central. Luego de varios días de sufrimiento, falleció el 2 de febrero de 1989.
Cabo Primero José Gustavo Albornoz

Nació en la Capital Federal y falleció cuando sólo contaba 24 años. A su egreso de la Escuela de Suboficiales Sargento Cabral como cabo de infantería, fue destinado al RI 8 con asiento en Comodoro Rivadavia, donde prestó servicios durante tres años. Posteriormente fue destinado al RI Mec. 3, lugar donde murió combatiendo contra el grupo subversivo del MTP que copó la unidad.

Estaba casado y era padre de un hijo de apenas un mes de vida.

Al iniciarse el ataque a la guardia de prevención, ya en poder del grupo subversivo, con la finalidad de rescatarla, el cabo 1ro. Albornoz, con personal de la guardia que tenía como misión resguardar el polvorín de la unidad, se adelanta a su fracción, siendo sorprendido por el fuego de los terroristas que le producen la muerte. Ante esta situación los soldados se repliegan hacia las caballerizas y parque de automotores, oportunidad en que también es alcanzado por el fuego enemigo el soldado Grillo, produciéndole la muerte.
Soldado clase 1969 Héctor Cardozo

Revistaba en el RI Mec. 3. Mientras permanecía como rehén en el casino de suboficiales tomado por los elementos subversivos, el fuego de artillería de propia tropa produjo el derrumbe de una pared que lo aplastó produciéndole la muerte. En tal circunstancia el soldado Cardozo estaba socorriendo a otro soldado que se encontraba herido y que no podía desplazarse, dada la confusión reinante entre los terroristas como consecuencia del intenso fuego que estaban recibiendo.

Posteriormente el cuerpo del soldado Cardozo fue utilizado como escudo por los subversivos que aún permanecían en el casino.
Soldado clase 1969 Martín l. Díaz

Pertenecía al RI Mec. 3. Desempeñándose como centinela apostado defendió su puesto hasta ser abatido por el grupo terrorista con un disparo en el pecho
Soldado clase 1969 Roberto t. Taddía

También pertenecía al Regimiento y al producirse el ingreso de los atacantes por la guardia de prevención mediante el empleo de varios vehículos, el soldado Taddía se encontraba barriendo las inmediaciones de dicha dependencia. Fue asesinado mientras tenía una escoba en la mano. Fue el primer muerto de La Tablada.
Soldado clase 1969 Julio d. Grillo

Revistaba en el RI Mec. 3. Formaba parte de una patrulla que trataba de evitar que el parque de automotores donde estaban los vehículos blindados cayese en poder de los atacantes; recibió un impacto de bala efectuado por éstos lo cual le produjo la muerte.
Comisario Garcia Garcìa
Policia de la privincia de Buenos Aires

Ante la informacion sobre extraños movimientos en el RI 3, el Sr. Comisario concurriò a la unidad y al acercarse a dialogar ( desconciendo la real situacion ), es asesinado con un disparo en el pecho.
Sargento Soria
Policía de la provincia de Buenos Aires
Las Acciones
El coronel Troiano confirmó que el segundo jefe de la unidad, el mayor Fernández Cutiellos, tuvo una actuación realmente heroica, tal como se había dicho en la crónica de anteayer. Indicó que repelió la agresión, pero que después de haber caído herido fue liquidado por los subversivos con un balazo en la garganta.

El teniente coronel Jorge Echezarreta acompañó a Fernández Cutiellos en los últimos momentos de su vida. "Lo llamé como lo hacía siempre, por su apodo. Me acerqué y me tomó la mano fuertemente al tiempo que levantaba el pulgar de la otra mano para darme a entender que todo estaba bien", dijo el militar con la cara crispada por la emoción.

"Tenía burbujas de sangre que le salían por la cara y poco después murió", dijo Echezarreta.
La Tablada ayer ...... La Tablada hoy ...... Olvidada u Ocultada ....