Taratuty, el nuevo Yabrán que está detrás del Boudougate
febrero 20, 2012
By Guillermo Cherashny El impresionante crecimiento de London Supplay durante la era K.
En todo negociado de un político hay detrás un poderoso empresario. En este caso, se trata del “zar de los free shops”, Teddy Taratuty, dueño de London Supplay, la concesionaria de los free shops de Iguazú y Punta del Este y operadora, además, de los aeropuertos -y free shops- de Ushuaia, Trelew y El Calafate, “el lugar en el mundo” de la presidente, que recientemente elogió la remodelación de aquél para convertirlo en aeropuerto internacional. En el Boudougate fue un representante de London Supply quien aportó 1.800.000 pesos por cuenta y orden de Alejandro Vanderbroele para levantar la quiebra de Ciccone Calcográfica. Este amigo y testaferro de Boudou habló luego, como nuevo dueño de la firma, ante el cuerpo de delegados gráficos de Ciccone. La principal denunciante de esta trama, la ex esposa de Vanberbroele Laura Muñoz, le apuntó también al “tercer hombre”, el empresario José María Núñez Carmona, el hombre clave en este trío que integra Amado Boudou y que está más cerca de una asociación ilícita que de una banda de rock. La S.A. Searen, que estaría controlada también por Taratuty a través de su sobrino Mickey Castellano, miembro del directorio de la firma, es la propietaria del departamento de Boudou en el edificio Madero Center de Puerto Madero. El mismo edificio donde, por curiosa casualidad, la presidente compró un piso contiguo al de Boudou, pero en este caso la vendedora habría sido una S.A. propiedad del dueño de Banco Macro, Jorge Brito.
Ahora, los pisos en el Madero Center y el aporte para levantar la quiebra de Ciccone huelen a un pago ilegal de London Supply a cambio de la concesión del aeropuerto internacional de El Calafate y no serían ajenos a estas maniobras el banquero Brito y Héctor Colella, el heredero de Alfredo Yabrán, fundador de los free shops en los aeropuertos argentinos. London Supplay viene creciendo en el rubro free shop y operación de terminales desde los gobiernos de Carlos Menem, pero a partir de que se hizo cargo del aeropuerto de Ushuaia multiplicó su presencia en el mercado. Según se conoce en medios empresarios, contribuyó a este veloz desarrollo el hecho de que la hermana menor de Taratuty mantuviera una estrecha relación afectiva con Néstor Kirchner, que habría durado varios años. En su acelerado desarrollo, London Supplay tejió además una red de influencias en la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), la Gendarmería y la Prefectura, las fuerzas que trabajan en las zonas de frontera y los aeropuertos. Los conocedores del tema recuerdan, además, que en la campaña presidencial del 2003 Kirchner utilizó frecuentemente el avión privado de Taratuty.
La conexión Aníbal F.
Otro costado del escándalo es la conexión con Aníbal Fernández de Daniel Jore Razzeto, presidente de SEAREN S.A. Razzeto fue presidente de Quilmes hasta el 2006 y ahora es uno de los tres vicepresidentes que acompañan la gestión de Aníbal Fernández como presidente. Razzeto habría intervenido en la triangulación entre London Supplay y Boudou, Núñez Carmona y Vanderbroele, con el apoyo del ahora senador nacional por Buenos Aires. Ésta sería la explicación de por qué CFK, pese a estar decidida a sacarse de encima a Fernández, terminó dándole el premio consuelo de una senaduría nacional por seis años. Estos compromisos explicarían también que el ex jefe de gabinete, lejos de mostrarse resentido con el cristinismo, que lo marginó del gabinete nacional, se muestra totalmente solidario con el gobierno. Sin ir más lejos, en los últimos días se dedicó a defender a su antigua rival, la ministra de seguridad Nilda Garré, sosteniendo que las acusaciones de espionaje ilegal a la Gendarmería carecen de todo fundamento.