El 23 de julio de este año, la revista brasileña Veja publicó un reportaje realizado al Fiscal del Tribunal Penal Internacional (TPI), Luis Moreno Ocampo.
La revista dice que “como fiscal-jefe del Tribunal Penal Internacional (TPI), el argentino Luis Moreno Ocampo, 56 años, está a cargo de una misión única, la de investigar y procesar a los responsables de crímenes contra la humanidad y genocidio, independientemente del país en que hayan sido cometidos. Ocampo también estudia la apertura de procesos contra extranjeros que ayudan a las FARC. Creado en 1998, con la adhesión de 107 países, el TPI es el primer sistema mundial de justicia permanente”.
La parte que más nos interesa dice:
Revista: Porqué el Tribunal Penal Internacional está interesado en los crímenes practicados por los narcotraficantes en Colombia?
MO: Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, las FARC, y los grupos paramilitares, efectúan ataques masivos e indiscriminados contra la población civil. Ese tipo de delito puede ser considerado crimen contra la humanidad. De esa forma, está bajo la jurisdicción del Tribunal Penal Internacional. Aún estamos en la fase de las pruebas preliminares que anteceden, obligatoriamente, cualquier investigación. Como fiscal-jefe, analizo las informaciones provistas por el gobierno colombiano y recorro el país. Estuve en Colombia en noviembre y tuve la oportunidad de conocer víctimas, jueces y al presidente Alvaro Uribe. Estuve monitoreando los procesos judiciales contra los grupos paramilitares y las FARC.
Revista: Documentos encontrados en las computadoras de uno de los jefes de las FARC capturados por el Ejército colombiano, indican que el grupo recibe ayuda de países vecinos, en especial de Venezuela y Ecuador. Esas conexiones también pueden ser investigadas por el tribunal?
MO: Aquellos que dan apoyo financiero a las FARC comparten la intención de cometer los delitos practicados por el grupo. Por eso, pueden ser considerados participantes en crímenes contra la humanidad. El apoyo político a un grupo como las FARC también puede ser considerado un delito y, dependiendo de las circunstancias, pasible de ser investigado por el país o por el TPI. Estamos evaluando ahora el caso de grupos o personas de fuera de Colombia, tanto de América del Sur como de Europa, que aparentemente apoyan a las FARC. Queremos saber si es el caso de iniciar un proceso. Por ahora, solo lo que yo puedo decir es que estamos reuniendo información sobre ese tema.
Si fuese así, varios estarían en capilla en Argentina. ¿O no?