El New York Times admite que usó información falsa en artículo a favor del aborto
La controversia comenzó el 9 de abril de 2006, cuando el periodista Jack Hitt, un colaborador del NYT que escribe sistemáticamente a favor del aborto, publicó un extenso artículo basado en el reportaje a dos mujeres, una de las cuales era Karina del Carmen Herrera Clímaco, una salvadoreña supuestamente condenada a 30 años de cárcel por abortar; y a quien Hitt ponía como ejemplo de la “inhumanidad” de las leyes contra el aborto del América Latina.
En el extenso artículo, que aún sigue siendo utilizado como propaganda por organizaciones abortistas latinoamericanas como “Mujer y Salud en Uruguay” (MISU), Hitt afirmaba que “el problema no era solo que en este país tan católico una tímida mujer de 24 años de edad (Herrera Clímaco) pudiera sentirse avergonzada de contarle su historia a un hombre mayor. Estaba también el estigma criminal”.
En el artículo, Hitt mostraba su clara posición a favor del aborto y ponía como víctima y heroína a Karina del Carmen Herrera Clímaco, de quien afirmaba que, “como toda persona que está en prisión, ha inhabilitado los detalles de su historia al punto de que ya no suenan verdades ni mentiras. La ha comprimido en un denso y sencillo cuento de inocencia”.
Seguidamente, el autor indicaba que el asunto al final “era algo así: Ella (Herrera Clímaco) había abortado a las 18 semanas, para nada diferente a un aborto en (Washington) D.C., algo totalmente legal en Estados Unidos. Sólo que abortó en El Salvador”.
El artículo de Hitt suscitó la indignación de numerosas organizaciones pro-vida de América Latina, algunas de las cuales se pusieron en contacto con la agencia informativa Lifesite News, la cual, con el apoyo de organizaciones pro-vida en El Salvador, reveló la realidad de los hechos y forzó al NYT a admitir el error.
En efecto, el pasado 31 de diciembre de 2006, Byron Calame, editor de lectores del NYT, explicó en un artículo titulado “Verdad, justicia y aborto en la revista Times” que el caso de Karina del Carmen Herrera Clímaco no tenía que ver con un aborto de una bebé de 18 semanas, sino con el asesinato a sangre fría de una bebé recién nacida que había sido estrangulada.
Los documentos de la corte, que Hitt se negó a revisar para su artículo, demuestran más allá de toda prueba que Herrar Clímaco asesinó por asfixia a su hija recién nacida, tiempo después del parto. La justicia la había condenado por asesinato en primer grado, no por aborto.
“Sin haber revisado los documentos de la corte con las explicaciones y el fallo, el autor del artículo, Jack Hitt, un escritor free lance, sugería que la ‘verdad’ era diferente”, dice Calame.
El Editor del NYT admitió también que “el cuidado en el informe y la edición de este ejemplo (el artículo de Hitt del 9 de abril) no cumplió con los estándares normales de la revista”.
Calame, que representa a los lectores al interior del diario, realizó su propia investigación interna sobre la razón por la cual los editores responsables de Hitt en NYT nunca corroboraron su historia, ni solicitaron pruebas tan elementales como los papeles judiciales del caso de Herrera Clímaco.
“El Sr. Hitt nunca revisó el fallo de siete mil 600 palabras del caso Clímaco para preparar su historia. Y él mismo me comentó que ningún editor o verificador de datos le preguntó si había revisado la decisión del panel de jueces”, subrayó Calame.
“A pedido mío, un colaborador del Times en El Salvador fue a la corte y sin hacer ninguna coordinación previa, salió unos minutos después con una copia del fallo. Resultó ser el mismo que LifeSiteNews.com difundió”, agregó el editor del NYT.
Blogs y prensa
Los más populares “blogs” de análisis de noticias en Estados Unidos hicieron eco al reconocimiento del editor de lectores del NYT; pero también a la resistencia de los editores responsables de Hitt a publicar una disculpa a los lectores.
La prensa de América Latina también ha denunciado el caso. Por ejemplo, El “Diario de Hoy” de El Salvador dedicó la primera plana y dos páginas interiores el pasado 4 de enero al tema bajo el título “Polémica por falsa abortista: ONG promotora de aborto solicitaba dinero por Internet para liberar a una mujer que estranguló a su hijo recién nacido”.
En efecto, el editor de lectores del NYT informa que, para realizar su reportaje, el periodista-activista utilizó un traductor gratuito proporcionado por la organización mundial pro-abortista IPAS para sus entrevistas con Herrera Clímaco.
Según Calame, la misma multinacional abortista “utilizó el artículo de la revista sobre la sentencia de la señora Clímaco para pedir donaciones en su sitio web de modo que ‘se consiguieran abogados que pudieran apelar en el caso’ y que ayudaran a la organización a ‘continuar con su trabajo de defensa’ en toda América Central’”.
El IPAS retiró el artículo de su página web luego que Calame se contactara con la mencionada organización.