GLADIUS 66. LA SOBERBIA…(7 PARTE)
P. RAMIRO SÁENZ.
MONISMO. Es decir, que toda realidad es comprendida y manipulada a partir de una idea abstracta originaria. Esta idea fecunda es al modo de deidad que da la inteligibilidad a todo y todo lo resuelve a partir de ella. Para el liberal será la libertad, para el marxista será la propiedad privada, para el nazi la raza y para el tecnócrata la eficacia. Todos los males tienen así fácil explicación y repuesta. Jamás la ideología coteja o verifica con realidad objetiva. A su vez, aunque sea a la fuerza, debe imponerse al hombre y a la sociedad para que de ella advengan todos los bienes.
A modo de ejemplo, todos los males sociales del mundo de hoy proceden de la ideología nazi-facista ; los problemas psicológicos el “ tabú “ del sexo que sembró ,la Iglesia ; los males económicos políticos, sociales, el bajo rendimiento escolar y hasta los trauma psicológicos de nuestra patria a los golpes militares y la falta de democracia, etc…
3) MANIQUISMO. Es una consecuencia de lo anterior. Toda realidad ahora se va a concebir simplemente como buena o mala, sin posibilidad alguna de convivir. Doble falsedad : la realidad se ha simplificado a la vez que se puesto en conflicto ( dialectizado ) en una lucha que es irrenunciable. Todas estas acciones serán buenas si responden a esa idea generadora, malas si las niegan. El mundo se dividirá en réprobos y elegidos. No hay más complejidad de la realidad ni matices.
Cuando los portadores de la ideología adquieren el poder, lo llevan delante de una manera absolutamente implacable y despiadada, al modo de una lucha religiosa, apocalíptica, entre el bien y el mal.
En estos falsos esquemas se analizada la realidad histórica y actual. Entonces la España misionera y conquistadora del siglo XVI será intrínsecamente mala en tanto que todos los nativos de América buenos ;la pobreza y el “ pueblo” son buenos en tanto que los ricos y los que ejercen la autoridad serán malos ; los guerrilleros de los años 70 son todos jóvenes idealistas e inocentes en tanto que los opuestos, civiles o militares, serán automáticamente perversos represores ;se es democrático o antidemocrático ( por lo tanto golpista y autoritario ) ; no queda otra que ser de de derecha o izquierda; etc. Por supuesto que a los que representan y agudizan estos esquemas dialécticos no les interesa para nada los pobres, ni el pueblo ni los indios. Sólo están usando un esquema capaz de estimular y desatar con eficacia las pasiones humanas y los conflictos- Especialmente la envidia, la ira y la soberbia. Todos falsos dilemas y falsas soluciones.
Hay que destacar al respecto dos notas características muy actuales.
Una es la capacidad para generar la actitud propia de fanático, que curiosamente el ideólogo atribuye al hombre religioso. Es que toda actitud religiosa es para la ideología, por definición, un fanatismo, un fundamentalismo .Esta actitud está reservada, de modo legítimo , sólo al ideólogo pero en el campo de la inmanencia.
Otra es el nacimiento de los totalitarismos. Ellos son esenciales a la ideología, no algo accidental o su oposición. No sólo porque los ideólogos se sienten los infalibles portadores del bien y la felicidad de la sociedad, sino que se sienten dueños de la vida total de los individuos, que en realidad no son sino una materia amorfa que deben modelar.
El liberalismo, desde sus comienzos, se ha manifestado tan “ tolerante “ y paradojalmente de la más absoluto incapacidad para la tolerancia. Lo demuestras las frases de dos padres de la Revolución Francesa antes citados, Rousseau y Voltaire, y nos advirtió hasta dónde es capaz de legar la represión de los contra-revolucionarios del oeste francés (vandeanos ). Lo mismo el marxismo, que tiene en sus entrañas de manera más explícita este principio en su esquema de “ lucha de clases “. Así por ejemplo:
“ La historia de toda sociedad, hasta nuestros días , es la historia de la lucha de clases….En nuestros días… toda sociedad se divide cada vez más, en vastos campos contrapuestos, en dos clases directamente enfrentadas : burguesía y proletariado…Los comunistas declaran abiertamente que no pueden alcanzar sus objetivos más que destruyendo por la violencia el antiguo orden social “-Karl Marx, El manifiesto comunista.- En otra obra había concluido: “ Lucha o muerte ; guerra sangrienta o nada. Así está la cuestión implacablemente planteada “-Karl Marx, Miseria de la filosofía, ed .Siglo XXI, Bs.As.1954, pag.160.- Para un marxista, las historia es la historia de la revoluciones.
Hoy podemos ver la tiranía de la democracia con los que se oponen a sus principios y decisiones y su creciente invasión en la vida privada de las familias y ciudadanos.
4) OPTIMISMO. Es otra de las constantes. Ya Hobbes y Locke habían anticipado a Rousseau en el optimismo antropológico : el hombre es radicalmente bueno. La presencia del mal en el mundo no se origina en la voluntad humana sino en ciertas estructuras. Por lo tanto el mejoramiento no llegará por las virtudes que corrigen y perfeccionan el ser del hombre. La justicia de que se habla no es ya una virtud del alma humana sino un estado de cosas. Con ello se ha quitado al hombre todo el peso posible de la culpa, la más onerosa de las cargas, y el único camino real de mejoramiento social.
El liberalismo ha dado la base a toda la ideología con su concepto de libertad, absolutamente opuesto al sentido cristina. Para sus cultores, consiste en la simple espontaneidad del individuo, en la ausencia de coacción exterior, en la absoluta autodeterminación , sin referencia alguna a la verdad ( por parte de la inteligencia ) y el bien ( por parte de la voluntad ). La esencia del mal es la eliminación a esa libertad absoluta; al bien máximo será su absoluta expansión. Como el día más acabado de poder en el orden humano es el poder político, a este lo consideran el desideratum máximo. Cuando esa libertad a asumido el poder político, se siente como absoluto y portador de una tarea mesiánica sobre la humanidad. Tenemos entonces el más despiadado de los totalitarismos.
El marxismo no ha hecho más que asumir esta misión sugerida por los liberales, corrigiendo algunos detalles de tipo político y económico, nada más. Es su natural continuidad. Para ellos la clase proletaria, santa y pura , encarnada en el partido, es la portadora de la redención. El “ Partido comunista ( El Partido obrero social-demócrata o bolchevique tomó oficialmente este nombre a partir de 1918.) es la realización mas acabada, en el plano de la eficacia práctica , de la idea de Rousseau sobre el legislador. Lo que dice el partido es verdadero por decirlo el partido : es imposible que se equivoque “-J.A.Window, op.cit., p.385- Con este punto entramos en la última nota que le es esencial..
( Continuaremos con la 8va. Parte. El Mesianismo temporal…El Director.)