El kirchnerismo admite que el caso De Vido le complica la campaña y debate qué hacer
El expediente, que el juez no validó, metió en la campaña de la ex presidente un factor incómodo pero que estaba en sus previsiones: la chance de que un ex ministro suyo, de los pocos que escudó en las listas de 2015, quede sin fueros e, incluso, en prisión.
"Es parte de la campaña, la veíamos venir" dijeron a Clarín desde el staff de Cristina que funciona de manera inorgánica: los candidatos se reunieron con la ex presidente y salen de gira pero no hay, en el sentido estricto, un comando de campaña.
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Entre el Congreso y el búnker del Instituto Patria, el pedido de Stornelli -el fiscal que, recordaban ayer en el PJ, fue ministro de Seguridad de Daniel Scioli- convirtió el caso De Vido en un caso testigo sobre cómo abordar en campaña los temas referidos a denuncias de corrupción."Nosotros ponemos el foco en la crisis económica y social, el Gobierno quiere ponerlo en temas de corrupción", interpretó un operador de la ex presidente y entendió que en la percepción pública "el bolsillo" pesará más que las denuncias.
Hay, según reconstruyó Clarín, varios elementos, un enfoque general y pocas certezas. De arranque, tras la resolución del juez Rodríguez ayer, en el kirchnerismo se consideró "cerrado" el tema desafuero. En un plano más fino se miden otros asuntos.
# Cristina diseñó una campaña con pocas apariciones suyas, bajadas sorpresas y de contacto directo. Hablan de look informal y mensaje crítico pero más sensible que guerrera. En el equipo K dicen que "está dando resultado" y que perciben "preocupación" en Cambiemos. Citan, por caso, las declaraciones de Rogelio Frigerio a Clarín en la que apunta a la ex presidente y La Cámpora. El ministro del Interior es visto en el PJ como uno de PRO moderado y sus dichos se leyeron como indicio de que los números no le dan bien a Cambiemos.
# En esa clave leen el pedido de desafuero de De Vido como parte de la campaña electoral que anuda, dicen, otros hechos: hablan de avanzadas sobre distritos gobernados por peronistas K y la difusión de "asuntos privados". "Están preocupados y están dispuestos a hacer cualquier cosa", plantea una voz K.
# Sobre el tema De Vido la mirada general es lineal: "Con o sin fueros, el tema lo van a meter en la campaña", dicen en Congreso donde entienden que la resolución de juez liquida el tema aunque, admiten, seguirá dando vueltas. Por lo pronto, sin el expediente en el Congreso, se vuelve abstracta lo que fue una discusión apenas estalló el tema: que el ex ministro, para evitar que el bloque del FpV tenga que defenderlo, decida pedir su paso al costado. El caso Angeloz.
# El miércoles, día de sesión, De Vido consultó a su bloque y se resolvió que lo mejor era que no participe de la sesión para no cambiar el eje de discusión. En paralelo, el scrum K salió a martillar sobre el artículo 37 de la ley de Responsabilidad Penal Empresaria que, con ironía, bautizaron el "artículo Odebrecht". De Vido tiene diálogo diario con Cristina aunque en el entorno de ambos no se confirmó si en estas horas hubo contacto. "Hablan siempre" avisaron.
# La discusión, que ayer dejaron en suspenso tras lo actuado por el juez Rodríguez giraba en torno a una posición táctica. Opciones: evitar que el tema baje al recinto porque asumen están los votos para desaforar a De Vido o bajar, a sabiendas de que perdían, para que los bloques "queden expuestos". Pura teoría: aunque algunas bancadas, como el BJ de Oscar Romero, candidato de Florencio Randazzo, anticiparon que votarían por el desafuero, en el FPV decían que no sería fácil para los diputados validar un precedente de desafuero. El otro elemento fue más visceral: iniciar pedido de desafueros a legisladores de Cambiemos.