Síntesis histórica de la yihad o
guerra santa
Por Jaime Cedillo
El Observador/15 de julio de
2016
¿Estamos en guerra? Sin duda, desde hace muchos
siglos. Se trata de un choque entre dos mundos, dos civilizaciones distintas,
dos visiones de la vida.
Vamos a echar un vistazo a la
historia:
Fue en el año 635, apenas tres
años después de la muerte de Mahoma, cuando los ejércitos de la Media Luna
comenzaron la Yihad contra Occidente, lo cual ha perdurado hasta nuestros días
en varios puntos de la Tierra.
En ese año 635 d.C. los musulmanes
se apoderaron de Jerusalén y del Santo Sepulcro.
En el año 640 conquistaron Persia,
Armenia y Mesopotamia (actualmente Irak). Invadieron Egipto conjuntamente con
Túnez, Argelia y Marruecos.
En el año 711, después de un
asedio de cinco años, tomaron Constantinopla, desembarcaron en la católica
península Ibérica, se apoderaron de Portugal y de España, donde dominaron por
unos 800 años.
En el 721 pasaron a Francia. Once
años duró esa batalla hasta que finalmente cayeron Burdeos, Poitier y otras
regiones.
En el año 732, el estadista y
gobernante francés Carlos Martel logró detener la invasión
musulmana.
En el año 827, los musulmanes
desembarcaron en Sicilia, conquistaron Messina y Palermo. Esta campaña duró 25
años y se quedaron dos siglos y medio en esa región, hasta que los normandos del
rey Roger de Sicilia lograron expulsarlos.
En el 846 llegaron a Roma,
expoliaron las basílicas de San Pedro y San Pablo y, para librarse de ellos, el
Papa Sergio ll pagó altísimos tributos. El Papa León IV tuvo levantar las
Murallas Leoninas.
En el año 911 pasaron a Suiza,
pero la nieve los venció y regresaron para establecerse en
Provenza.
Las Cruzadas fueron las respuestas
a cuatro siglos de invasiones musulmanas. Fueron la contraofensiva para bloquear
el expansionismo islámico en Europa, por lo cual se dirigieron hacia el
Oriente.
Descendientes de esos musulmanes
formaron el Imperio Turco-Otomano, que se concentró sobre Occidente hasta el año
1700 y transformó a Europa en su campo de batalla preferido.
En el año 1356, ochenta y cuatro
años después de la octava cruzada, los turcos islámicos se apoderaron de
Gallípoli y de allí siguieron hacia Europa, donde invadieron Tracia, Macedonia y
Albania, además de doblegar a Serbia y a Constantinopla.
En 1444, aseguraron su dominio en
Moldavia y Transilvania, lo que hoy día son Bulgaria y Rumania. En 1453,
Constantinopla se convirtió en Estambul, capital de Turquía.
El 1456, conquistan Atenas, donde
permanecieron por cuatro siglos.
En el año 1526, Solimán “El
Magnífico” cayó sobre Hungría y en ese mismo año llegó a Austria, donde la
resistencia fue tenaz. Pero Solimán continuó su campaña por mar y convirtió
junto a Barbarroja (Khayr al Din) al Mar Mediterráneo en un feudo marítimo del
Islam.
En el año 1565 sometieron a la
isla de Malta.
En el año 1571 tomaron Chipre.
Pero en ese mismo año nació la alianza entre España, el Papado Romano, Génova,
Florencia, Turín, Parma, Mantua, Lucca, Ferrara, Urbino y Malta, y triunfaron
con la conquista del Mar Mediterráneo en la batalla de Lepanto.
En el año de 1672, después de 101
años de la batalla de Lepanto, los musulmanes llegaron a Polonia y asediaron
nuevamente a Austria el 12 de septiembre. Pero los pueblos europeos unidos
consiguieron la victoria frente a Kara Mustafá, quien logró
escapar.
Hay algo que todos debemos tener
bien claro: la invasión a Europa no ha terminado. Hoy persiste en una forma más
sutil, como lo anunciara el presidente de Argelia Houari Boumediene ante las
Naciones Unidas en el año 1973: “Un día millones de hombres abandonarán el
hemisferio sur para irrumpir en el hemisferio norte y no lo harán precisamente
como amigos. La conquista será con sus hijos, a través del útero de nuestras
mujeres. Eso nos otorgará la victoria”. Boumedien recibió un caluroso
aplauso.
Hoy día, alrededor de 153 millones
de musulmanes viven entre la costa atlántica y los Urales. En Europa hay unos 18
millones y fuera de la Unión Europea viven 35 millones. En Suiza constituyen el
10 por ciento de la población. En Rusia son el 10.5 por ciento. En Georgia el 12
por ciento. En Malta el 13 por ciento. En Bulgaria el 15 por ciento. En Chipre
el 18 por ciento. En Serbia el 19 por ciento. En Macedonia el 30 por ciento, así
como en Bosnia-Herzegovina. Año tras año los bebés que nacen en la Unión Europea
constituyen el 10 por ciento de los neonatos. En Bruselas, la población
musulmana es el 30 por ciento y el Marsella son el 60 por ciento.
En resumen, la invasión está en
marcha, continúa por varios medios, incluidas las armas.