ESTA NO ES LA ARGENTINA EN QUE NACÍ
Y ME CRIE
Esta no es la Argentina en la que yo
nací y me crie. Me siento como trasladado a un país
extraño. Repleta de pobres y manejada por mafias. No es la pobreza lo que me
espanta, sino como potenciaron esa pobreza hasta llevarla al grado de
indignidad en que hicieron caer a mucha gente.
ROBERTO CACHANOSKY - ECONOMIAPARATODOS
La semana pasada, mientras comíamos les
decía a mis hijos, que tienen entre 23 y 28 años, que esta no es la Argentina en la que yo
nací y me crie. Me siento como trasladado a un país
extraño. Repleta de pobres y manejada por mafias. No es la pobreza lo que me
espanta, sino como potenciaron esa pobreza hasta llevarla al grado de
indignidad en que hicieron caer a mucha gente.
Recuerdo que de chico, uno de mis tíos,
nos llevaba a mis hermanos y a mí a dar vueltas por las escasas villas miseria
que había en Buenos Aires para que viésemos como vivían los pobres. Nadie tenía
miedo de pasar por esos lugares. Era gente pobre, humilde pero decente.
Lo que ha hecho el peronismo en general y
el kirchnerismo en particular, es generar una fábrica
de pobres que viven de los subsidios que les dan los punteros políticos.
Someter a la gente a la pobreza y luego mantenerlos con subsidios estatales es
una forma de asegurarse el voto de una parte importante del electorado. Si no
me votás, el que venga te saca el subsidio.
Cuando CF dice que le deja un país cómodo
a la gente e incómodo a los políticos, y agrega: no se dejen quitar sus
derechos, lo que en definitiva está diciendo es: construí mi poder en base al
clientelismo político fabricando pobres que dependen de los subsidios que les
doy. Como no tengo reelección, dejo sembrado un campo minado de subsidios
llamados sociales, tarifas artificialmente bajas, distorsiones cambiarias, un
gasto público infinanciable y una presión impositiva
que destruye la economía. Hasta me animaría a decir que, salvo por sus
problemas judiciales, CF no querría seguir en el poder para que no le explote
el campo minado a ella. Prefiere dejárselo a otro y no asumir el costo de
arreglar el deliberado destrozo económico que hizo.
La oposición sabe que todos estos
problemas los va a heredar, así como el kirchnerismo
también sabe que si hubiese seguido en el poder los habría heredado. Pero no
tengo ninguna duda que, dado lo infinanciable del
populismo montado, el kirchnersimo recurriría a la
represión y al autoritarismo para frenar el descontento social. Quienes hoy son
el clientelismo político del oficialismo, pasarían a ser los enemigos y la
represión sería el último recurso que tiene todo sistema populista que va
mutando hacia el autoritarismo. Primero construyeron poder en base al
clientelismo político y luego tratan de mantener el poder usando el monopolio
de la fuerza. Basta con ver al chavismo en Venezuela
racionando los alimentos y metiendo preso al pobre hombre que quiso comprar dos
pollos en vez de comprar 1 pollo por persona como lo permite la carta de
racionamiento.
¿Acaso Maduro no metió al ejército a
custodiar las mercaderías en los supermercados? ¿De quién la custodian?
Obviamente de la gente humilde que tiene hambre y hay que frenarla, si es
preciso a los tiros, para que no se revela contra el
autoritarismo.
¿No es Maduro el que puso control de
huellas digitales en las cadenas de supermercados para controlar qué compra la
gente? Esos son los aliados del kirchnrismo y ese
sería el futuro de Argentina si el kirchnerismo
siguiera en el poder. Primero clientelismo y luego palos al que protesta ante
la miseria.
Por eso llega un punto en que el
argumento del voto deja de tener peso para los regímenes autoritarios como el kirchnerismo o el chavismo y solo
tienen forma de sostenerse en el poder mediante la fuerza bruta y el fraude.
Fidel Castro no anunció desde Sierra
Maestra que iba a luchar para establecer una feroz dictadura. Primero dijo que
combatía la dictadura de Batista, se ganó la simpatía del pueblo y cuando tuvo
el poder puso una dictadura peor que la de Batista. Los tiranos son mentirosos
por definición.
Ahora bien, ¿qué puede hacer el próximo
gobierno para cambiar este estado de cosas? ¿Cómo podemos recuperar esa
Argentina en que crecimos y nos criamos, en que trabajar era un valor y robar
implicaba el desprecio y sanción de la sociedad? En primer lugar acepto que
durante la campaña electoral los partidos opositores no podrán decir todo lo
que tienen que hacer porque perderían votos. ¿Cómo conseguir votos diciéndole a
la gente que los servicios públicos ya no pueden seguir siendo regalados, que
los llamados subsidios sociales tienen que ser revisados y la gente deberá
aprender a vivir de su trabajo, o que la legión de empleados públicos que puso
el oficialismo tendrán que salir eyectados de sus puestos y ponerse a trabajar
en serio? La realidad es que acá hay muchos viviendo del trabajo de unos pocos.
Ese fue el truco político del kirchnerismo para
acumular poder. El problema es que ese truco ya no puede financiarse. Habrá que
asumir la realidad.
De manera que el próximo gobierno, además
de arreglar los destrozos que dejará el kirchnerismo
tendrá que hacer docencia. Explicarle a la gente que no es viable un país en el
que todos consumen y cada vez menos producen, porque lo que se produce para
consumir es cada vez menos como consecuencia de la desinversión
de todos estos años más las trabas que impone el gobierno a quienes todavía
producen.
Por empezar, así como los jubilados les
hacen poner el dedo para dar su prueba de supervivencia y poder seguir cobrando
la jubilación, a los que reciben planes sociales hay que hacerles poner el dedo
y ver cuántos planes sociales cobran. Pero, además, avisarles que si aparece un
trabajo tienen que tomarlo porque automáticamente pierden el plan social. El
plan social es solo transitorio hasta que consigan un trabajo.
Es obvio que va a haber reacción social.
A nadie le gusta que le digan que se acabó la fiesta y tiene que ir a trabajar.
Pero comunicando bien esta estrategia, la montaña de subsidios que ya no puede
ser sostenida por la gente que trabaja en blanco puede desarmarse. Juan, Pedro
y José tendrán que empezar a trabajar una vez que le avisen que hay un trabajo
para él.
No hay lugar en el interior del país,
particularmente en el NOA y el NEA que cuando voy a dar una charla no pregunte
si consiguen mano de obra para trabajar. La respuesta invariablemente es la
misma. Sí pero en negro porque nadie quiere trabajar en blanco y perder el
subsidio. Con los subsidios que cobran y unas changas que hagan al mes tienen
un buen pasar.
Esto es parte del gran desafío que habrá
que enfrentar. Reconstruir la cultura del trabajo. Y eso se logra con, por lo
menos dos cosas: a) crear las condiciones para atraer inversiones y crear
puestos de trabajo y ) licuar los subsidios de manera tal que para el que hoy
vive de subsidios vea que consigue más dinero trabajando y que apenas puede
sobrevivirlos llamados planes sociales.
No digo que el próximo gobierno pueda
cambiar y arreglar todo lo que se destruyó en estos 12 años, pero si espero que
gire 180 grados en el rumbo que hoy tiene la Argentina. Mostrarle
a la gente que el kirchnerismo no les deja un país
cómodo, sino un país que los denigró como seres humanos.
En síntesis, espero que el próximo
gobierno gire el rumbo y enfilemos nuevamente hacia aquél país en que nací y me
crié, donde trabajar estaba bien visto y ser un vago y mantenido merecía el
desprecio de la gente decente. Y que, por supuesto, los corruptos y ladrones
iban presos.