España
¿Cuánto cuestan los actos vandálicos a nuestros bolsillos?
Burgos es la última ciudad que no sabe cómo frenar a quienes, en solo una semana, han intentado quemar la puerta del Ayuntamiento y han decapitado tres estatuas de una iglesia
Los vecinos de Burgos están hartos. En la última semana, han intentado quemar la puerta del Ayuntamiento y han aparecido decapitadas tres figuras en la fachada de la Iglesia de San Esteban, tallas del siglo XIII. Desde el Consistorio aseguran que no saben qué hacer para atajar este tipo de actos vandálicos, que tampoco entiende la ciudadanía, y que tantos quebraderos de cabeza están ocasionando en otras ciudades, como Valencia, Madrid o Granada.
Recientemente, el Ayuntamiento granadino dio a conocer que el bagaje de los vándalos y graffitis en la urbe había acabado con el 75% de sus monumentos "tuneados" con las incívicas pintadas, lo que iba a causar un desembolso de miles de euros para la limpieza. No se salvaron ni las paredes de la catedral, donde aparecieron graffitis dos veces sin contemplaciones. Las sanciones en esta ciudad alcanzan los 3.000 euros si se logra identificar a los autores de la agresión contra el patrimonio público, pero durante todo 2010 solo tres personas fueron multadas por este delito en Granada.
Solo en Madrid se gastan unos 6 millones al año en limpiar pintadas
800.000 euros en el metro de Valencia
Las multas en Madrid, con una ordenanza remozada el año pasado, oscilan de 1.500 euros a los 6.000 de los reincidentes en estas prácticas, una medida que originó en su día polémica por lo elevado de la cuantía. No obstante, desde el Consistorio aseguran que se hubo de invertir seis millones de euros en Madrid para devolver el mobiliario urbano a su estado original.
Solo en Valencia, el Metro ha tenido que invertir 800.000 euros para reparar la innumerable cantidad de desperfectos que, día tras día, ocasionan quienes no bajan al suburbano a viajar.