HISTORIA | Efemérides de la aviación española
El día que Bilbao se rindió a Franco... por el vuelo del hidroavión 'Plus Ultra'
Vídeo: Efe
- El 'Plus Ultra' cubrió la distancia entre Palos y Buenos Aires
- Amerizó en el Río de la Plata el 10 de febrero de hace 85 años
- Franco, Ruiz de Alda, Rada y Durán fueron sus tripulantes
- Argentina se volcó literalmente con las celebraciones
Actualizado sábado 12/02/2011 10:03 horas Quede claro que Bilbao es Bilbao, o para ser más exactos, la sinécdoque del teatro Arriaga puesto en pie aclamando a su héroe, y que Franco es Franco, pero no del todo: Ramón Franco Bahamonde, piloto junto con Julio Ruiz de Alda, del hidroavión 'Plus Ultra' que logró la hazaña de volar entre Palos de la Frontera (Huelva) y Buenos Aires (Argentina) batiendo plusmarcas de velocidad media y distancia hace ahora 85 años.
Fue el 10 de febrero de 1926 cuando el Dornier Wall equipado con dos motores Napier Lion de 450 caballos, con la clave radiotelegráfica EDR12, desató la histeria colectiva al amerizar en el Río de la Plata tras un agotador raid aéreo en el que habían recorrido 10.270 kilómetros en 59 horas y 39 minutos a lo largo de siete etapas.
Era el cuarto vuelo trasatlántico de la historia y una hazaña que la dictadura de Primo de Rivera supo explotar en su beneficio. La gesta de Franco, Ruiz de Alda (posteriormente, uno de los tres fundadores de la Falange), el mecánico Pablo Rada y el observador Juan Manuel Durán se inscribe con letras de oro en la historia de la aviación española.
En ese podio comparte honores con la flotilla 'Elcano', que voló de Madrid a Manila avanzado 1926 también; el 'Jesús del Gran Poder' que unió Sevilla y Bahía (Brasil) en 1929; y el 'Cuatro Vientos', que saltó de Sevilla a Camagüey (Cuba) antes de perderse para siempre en México.
Argentina se volcó literalmente con los aviadores españoles y agradeció vivamente la donación del aparato, que todavía hoy se exhibe en Buenos Aires. Carlos Gardel grabó en Barcelona el tango 'La gloria del águila' que decía así: "Y cantarán con todas las naciones / entrelazando los corazones, / y en tal clamor surge un tango argentino / que dice a España, Madre Patria de mi amor".
El raid -palabra de la época- duró desde el 22 de enero al 10 de febrero, pero las celebraciones se alargaron mucho más. Alfonso XIII los homenajeó en La Rábida, el monasterio donde Colón maduró su plan para viajar a las Indias por Occidente antes de planteárselo a los Reyes Católicos en Santa Fe.
El 6 de abril, dos meses después de tocar la gloria en Buenos Aires, todavía recibieron un homenaje más en Sevilla, cuyo campo de aviación de Tablada resultaba en aquellos años la punta de lanza de la aeronáutica nacional.
No sólo hubo agasajos, sino obsequios contantes y sonantes: 10.000 pesetas de entonces con las que los recompensa el marqués de Viana. Y Pablo Rada se hace acreedor a la primera medalla de oro del Trabajo concedida en España.
El final de los protagonistas, no obstante, es más trágico: Durán murió en julio de aquel mismo año de 1926 en un accidente aéreo en Barcelona; Ruiz de Alda cayó fusilado diez años después en los primeros días de la sublevación militar contra la II República; Ramón Franco pereció en Mallorca en 1938 en una misión aérea con el bando que encabezaba su hermano Francisco en la Guerra Civil.