Seccion: Internacionales
Ante una multitud, el Papa llamó a la paz en Medio Oriente
Ofició una misa Bendicto VXI durante su tercer día de viaje en Jordania. Instó a los cristianos que viven allí a tener el "coraje" de permanecer en el lugar. Frente a 30 mil personas, Ratzinger pidió "respeto" para las mujeres y criticó su "explotación".
El papa Benedicto XVI, en su tercer día de viaje por Tierra Santa, ofició una misa multitudinaria en Ammán durante la cual exhortó a los cristianos que viven las "dificultades y problemáticas" de los pueblos de Medio Oriente a tener el "coraje" de permanecer allí.
El Pontífice dijo que el "respeto y la dignidad de las mujeres proclamados por la Iglesia de Tierra Santa ayudan a una sociedad más justa y contrastan con una visión basada sólo en el "provecho y la explotación".
Estos fueron los dos mensajes principales que Joseph Ratzinger quiso dejar a los cristianos en su primera misa pública en el estadio Internacional de Ammán, frente a unas 30 mil personas, según el Vaticano, muchas de las cuales arribaron de los países vecinos.
En la homilía, el Papa pronunció una frase que algunos interpretaron dirigida contra el aborto y otros contra los kamikazes.
El patriarca latino de Jerusalén, Fouad Twal, dio la bienvenida en árabe al Pontífice y recordó que desde el inicio de la guerra en Irak "más de un millón de refugiados llegaron a Jordania y casi 40 mil son cristianos".
Benedicto XVI reiteró su pedido que se respete la dignidad de la mujer y no sea considerada sólo bajo el aspecto "de la explotación y del beneficio".
Ratzinger fue recibido con entusiasmo en su primer acto multitudinario, en un estadio repleto de banderas del Vaticano, Jordania, Líbano y otros países de Medio Oriente.
La Iglesia de Tierra Santa testimonia "respeto y dignidad de la mujer" y con esto puede hacer "una importante contribución a la construcción de la civilización del amor", contra los que consideran a las mujeres sólo bajo el aspecto de la "explotación y del provecho", afirmó.
"Con su pública defensa del respeto para las mujeres y de la innata dignidad de toda persona humana, la Iglesia en Tierra Santa puede dar una contribución al desarrollo de una cultura de verdadera humanidad", sostuvo el Pontífice.
"Les pido un particular tipo de coraje: el coraje del convencimiento nacido de una fe personal, no simplemente de una convención social o de una tradición familiar", subrayó el Papa.
"El coraje de comprometerse en el diálogo y de trabajar junto con los demás cristianos en el servicio del Evangelio y en la solidaridad con el pobre", expresó.
El Papa tiene previsto visitar luego el sitio jordano del bautismo de Jesús, donde bendecirá las primeras piedras de las iglesias de los latinos y de los greco-melquitas.
Ante una multitud, el Papa llamó a la paz en Medio Oriente
Ofició una misa Bendicto VXI durante su tercer día de viaje en Jordania. Instó a los cristianos que viven allí a tener el "coraje" de permanecer en el lugar. Frente a 30 mil personas, Ratzinger pidió "respeto" para las mujeres y criticó su "explotación".
El papa Benedicto XVI, en su tercer día de viaje por Tierra Santa, ofició una misa multitudinaria en Ammán durante la cual exhortó a los cristianos que viven las "dificultades y problemáticas" de los pueblos de Medio Oriente a tener el "coraje" de permanecer allí.
El Pontífice dijo que el "respeto y la dignidad de las mujeres proclamados por la Iglesia de Tierra Santa ayudan a una sociedad más justa y contrastan con una visión basada sólo en el "provecho y la explotación".
Estos fueron los dos mensajes principales que Joseph Ratzinger quiso dejar a los cristianos en su primera misa pública en el estadio Internacional de Ammán, frente a unas 30 mil personas, según el Vaticano, muchas de las cuales arribaron de los países vecinos.
En la homilía, el Papa pronunció una frase que algunos interpretaron dirigida contra el aborto y otros contra los kamikazes.
El patriarca latino de Jerusalén, Fouad Twal, dio la bienvenida en árabe al Pontífice y recordó que desde el inicio de la guerra en Irak "más de un millón de refugiados llegaron a Jordania y casi 40 mil son cristianos".
Benedicto XVI reiteró su pedido que se respete la dignidad de la mujer y no sea considerada sólo bajo el aspecto "de la explotación y del beneficio".
Ratzinger fue recibido con entusiasmo en su primer acto multitudinario, en un estadio repleto de banderas del Vaticano, Jordania, Líbano y otros países de Medio Oriente.
La Iglesia de Tierra Santa testimonia "respeto y dignidad de la mujer" y con esto puede hacer "una importante contribución a la construcción de la civilización del amor", contra los que consideran a las mujeres sólo bajo el aspecto de la "explotación y del provecho", afirmó.
"Con su pública defensa del respeto para las mujeres y de la innata dignidad de toda persona humana, la Iglesia en Tierra Santa puede dar una contribución al desarrollo de una cultura de verdadera humanidad", sostuvo el Pontífice.
"Les pido un particular tipo de coraje: el coraje del convencimiento nacido de una fe personal, no simplemente de una convención social o de una tradición familiar", subrayó el Papa.
"El coraje de comprometerse en el diálogo y de trabajar junto con los demás cristianos en el servicio del Evangelio y en la solidaridad con el pobre", expresó.
El Papa tiene previsto visitar luego el sitio jordano del bautismo de Jesús, donde bendecirá las primeras piedras de las iglesias de los latinos y de los greco-melquitas.