martes, octubre 09, 2007

Evangelio de San Lucas, 1, 46-55

EL MAGNIFICAT

Evangelio de San Lucas, 1, 46-55

«Proclama mi alma la grandeza del Señor,
se alegra mi espíritu en Dios mi Salvador;
porque ha mirado la humillación de su esclava.
Desde ahora me felicitarán todas las generaciones,
porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí;
su Nombre es santo
y su Misericordia llega a sus fieles
de generación en generación.
Él hace proezas con su brazo:
dispersa a los soberbios de corazón,
derriba del trono a los poderosos,
enaltece a los humildes,
a los hambrientos los colma de bienes
y a los ricos los despide vacíos.
Auxilia a Israel, su siervo,
acordándose de la Misericordia
—como lo había prometido a nuestros padres—
en favor de Abraham y su descendencia por siempre»

LA ORACIÓN DE MARÍA SANTÍSIMA EN EL "MAGNIFICAT"